El País Vasco destilará a 92 céntimos por litro, seis más que en la Comunidad riojana

En este sentido, el País Vasco ha optado por aplicar el máximo permitido por la Comisión Europea y el Ministerio de Agricultura, mientras que La Rioja optó por rebajarlo a última hora con el fin de ampliar el volumen destilado. Asimismo, mientras que el Gobierno riojano ha comprometido 17 millones de euros para esta campaña (y otros 15 para la próxima), el Ejecutivo vasco empleará 8 millones para este año –su superficie de viñedo y su capacidad de elaboración es menor– y, por el momento, no ha dicho nada para el próximo.

Otra diferencia significativa es que, mientras el Gobierno de La Rioja exige que todas aquellas bodegas solicitantes tenían que haber elaborado uva en 2022, en el caso de Rioja Alavesa esta misma última cosecha se toma como referencia para calcular los porcentajes que dan derecho a destilar, pero, si no hubo elaboración, admite también la campaña 2021.

Asimismo, el Gobierno de Capellán contabiliza exclusivamente los vinos elaborados el año pasado con uva de viticultores riojanos y exige un compromiso de compra para esta campaña de al menos el 70% de la uva que se adquirió en 2022 también a viticultores riojanos, mientras que el Ejecutivo de Urkullu no regula ningún compromiso similar para uva o viticultores alaveses.

La escala de priorización de las solicitudes para acceso a las ayudas también es diferente en ambos territorios. En Rioja Alavesa se opta por una fórmula más sencilla, que prima a la bodega pequeña y a las cooperativas por volúmenes reconocidos para destilar. Así, las bodegas que elaboraron más de 500.000 litros el año pasado únicamente podrán destilar el 10% del total de su vino amparado por la DOCa Rioja en 2022. El porcentaje se amplía al 15% para volúmenes de elaboración entre 250.000 y 500.000 litros, mientras que para las bodegas más pequeñas y cooperativas se amplía hasta el 20%.

En el caso de la Comunidad riojana se optó también por primar, en este caso con una escala de puntos, a pequeñas bodegas (hasta 350.000 litros) y a cooperativas con 10 puntos, frente a 5 puntos para sociedades agrarias de transformación y bodegas con volúmenes de 350.000 hasta 1 millón de litros. Asimismo, se dieron otros diez puntos a las elaboradoras que no solicitaron ayudas para almacenamiento de vinos durante la pandemia, mientras que el País Vasco lo que ha hecho es excluir los vinos que fueron subvencionados, aunque no las bodegas.

Otra diferencia fundamental es que mientras en La Rioja se ha hecho una convocatoria exprés, con apenas cinco días para solicitar las ayudas, el Gobierno Vasco se lo ha tomado con más calma y deja plazo hasta el 31 de octubre para presentar las solicitudes.

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