Las obras de la Ronda Sur comenzarán el año que viene y estarán listas en el 2023

Tan decisivo paso en un proyecto tan largamente esperado, confirmado por el delegado del Gobierno en La Rioja, José Ignacio Pérez, supondrá la mayor inversión de la Administración General del Estado en La Rioja, tal y como puso de manifiesto. Y es que finalmente el presupuesto estimado será de 149,3 millones de euros a los que habrá que sumar los alrededor de 50 millones de indemnización a Avasa que supondrá 'liberar' los 24,6 kilómetros de autopista -a los que se sumarán 4,6 de autovía de nueva construcción-, según adelantó el ministro Ábalos.

La licitación en sí por parte de Fomento se producirá «en próximas semanas» con su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE) con la previsión de que las obras comiencen el año que viene -«más a mediados que a principios»- y se prolonguen por un plazo de tres años y medio. Así, y con un plazo de ejecución de 42 meses, el horizonte que se divisa, aunque siempre dependiendo de la adjudicación e inicio de obras, es el del 2023 como año para su entrada en funcionamiento. Nadie habló de plazos, en cualquier caso, en Muro de la Mata 3 remitiendo a los medios en todo momento al próximo anuncio oficial de licitación.

El proyecto contempla la utilización del citado tramo de autopista como Variante Sur de Logroño «con una amplia remodelación en cuanto a la implantación de nuevos enlaces y remodelación de los ya existentes con el fin de mejorar su conexión con las redes estatal y autonómica». «No sólo se trata de liberarlo, sino de permeabilizarlo», aclaró Pérez, acompañado por el ingeniero jefe de la Demarcación de Carreteras del Estado en La Rioja, Enrique García Garrido, quien también incidió en la idea de que el proyecto «es más que la Ronda Sur de Logroño, es también una variante de trazado de la N-232 entre Arrúbal, Agoncillo y Recajo».

La actuación, de hecho, se encuentra recogida en el protocolo de colaboración firmado el pasado mes de mayo entre la Administración General del Estado y el Gobierno de La Rioja para mejorar la funcionalidad y movilidad del corredor viario formado por la autopista AP-68 y la carretera N-232.

El nuevo tramo de autovía, que aprovecha en su mayor parte el trazado actual de la AP-68, discurre con dirección este-oeste por los términos municipales de Murillo de Río Leza, Agoncillo, Arrúbal, Logroño, Villamediana de Iregua, Lardero, Navarrete y Fuenmayor. El tramo de nueva A-68 se contempla libre de peaje por lo que el proyecto contempla la construcción de dos nuevas áreas de peaje troncales que se ubicarán en los p.k. 150,5 y 122 de la AP-68 y entre un punto kilométrico y otro se diseñarán o remodelarán un total de 8 enlaces -dos conexiones, las citadas de inicio y final, y seis enlaces en Arrúbal, Agoncillo, Recajo, LR-250, Logroño y Lardero/N-111 y A-12/Variante de Fuenmayor-.

Además, en el tronco de la autovía, en toda la longitud del proyecto y en cumplimiento de la normativa actual, se revisarán y adecuarán todos los elementos de señalización, balizamiento y sistemas de contención existentes y los despejes necesarios en curvas a efectos de garantizar la visibilidad. Asimismo, y dadas las características del firme actual de la AP-68 y el notable incremento de tráfico esperado, se reforzará el mismo en todo el tramo de actuación.

Se contempla, además, la realización de 30 estructuras: 12 pasos superiores, 15 pasos inferiores, además de 3 muros de contención, siendo dos de hormigón armado y uno de escollera. Y, de la misma manera, la reposición de 48 caminos agrícolas y del tramo del Camino de Santiago afectado por las obras en el último enlace para lo que se diseñará un paso superior y dos pasos inferiores.

«Respondemos así a ciertas sospechas de que no se iba a hacer y a la promesa de licitación en este año. El proyecto comenzó en el 2005, si bien su primera modificación fue en el 2008, hasta llegar a hoy. Diez años y, por tanto, los méritos corresponden a tres Gobiernos, si bien es cierto que la aprobación del proyecto constructivo data del 27 de noviembre del 2017 y hasta el pasado junio no se hizo nada cuando nosotros lo reactivamos», recordó.

La noticia, «de esas por las que merece la pena ser delegado del Gobierno y poder anunciarlas», en palabras de José Ignacio Pérez, fue celebrada tanto por el Ayuntamiento de Logroño como por el Gobierno de La Rioja, que en cualquier caso no evitaron polemizar . «Queda demostrado que el anterior Gobierno hizo bien su trabajo y que era posible licitar la Ronda Sur... solo la presión desde Logroño ha evitado que se paralizara», reaccionaba la alcaldesa, Cuca Gamarra, que celebraba el anuncio pero recordaba que en agosto -en declaraciones a Diario LA RIOJA- el delegado declaraba que la licitación era imposible. «Se encontraron el proyecto aprobado, iniciadas las expropiaciones y las conversaciones con la concesionaria y partida presupuestaria; sólo tenían que licitar», sentenciaba.

Por su parte, desde el Gobierno de La Rioja se destacaba que la Ronda Sur forma parte del protocolo para avanzar en la mejora de las comunicaciones por carretera y que el compromiso del Ministerio de Fomento es licitar las obras este mes con su publicación en el BOE. «El ministro de Fomento, José Luis Ábalos, se comprometió en su reciente visita a La Rioja, el pasado 8 de noviembre, a licitar las obras de este proyecto de especial importancia para la región en el actual mes de diciembre», recordaban en nota de prensa.

Asimismo, añadían, también anunció la previsión de hacer lo propio con los trabajos para remodelar la intersección de la N-111 con la LR-254 en Lardero, cuyo presupuesto, en este caso, se estima en 2,24 millones.