María Marrodán confía en reforzar el partido en la comunidad y pasar página de cualquier fisura interna.
– ¿Qué objetivos se plantea como nueva número '2'?
– Los mismos que los expresados por Andreu desde que anunció su intención de liderar el partido: hacerlo más fuerte, más grande y reforzado, con unas líneas políticas que nos hagan capaces de conectar con la ciudadanía. Mi objetivo será así ayudar a alcanzar la meta de que el PSOE gane las elecciones y Concha Andreu vuelva a ser presienta del Gobierno.
– ¿También coser las heridas internas que se han producido en los últimos tiempos?
– En este congreso se ha hecho un enorme esfuerzo por unificar, por sumar y no dejar a nadie fuera. Entiendo que esta cita ha servido para cerrar las heridas que hayan podido existir, haciendo un partido más robusto que suma capacidades y con un proyecto transformador.
– ¿Es compatible su nueva responsabilidad orgánica con la Delegación del Gobierno?
– Sí, perfectamente. El equipo conformado por la presidenta es amplio y tiene voluntad de desempeñar una labor coral.
– Ha pasado de concejala en Logroño a diputada nacional, luego delegada del Gobierno y ahora también número '2' del PSOE. ¿Aspira a algo más?
– Ni cuando empecé en política ni ahora he tenido un camino trazado. Siempre he estado y estaré allí donde se considere que soy más útil para un proyecto en el que creo profundamente. Puede ser aquí, en otro puesto o quizá en ningún lado.
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