Nuevos aires para regresar a los 200

La cercanía a Logroño y la comunicación rápida mediante la A-12 han propiciado que este pueblo, a los pies del Moncalvillo y del Camino de Santiago, no solo haya aumentado la población sino que, además, haya rejuvenecido. Actualmente aporta una docena de alumnos al CEIP Nuestra Señora del Sagrario de Navarrete, el municipio que más traslada, y media al IES Francisco Tomás y Valiente de Fuenmayor.

Elena Arbaizar también es una nueva vecina, se asentó en Ventosa en 2022. «Quería un cambio de vida, una vida más tranquila. Compré una de las casas más antiguas y la he rehabilitado», cuenta Elena, quien primero trabajó de auxiliar de alguacil en el Ayuntamiento y actualmente ejerce la docencia en el IES La Laboral de Lardero. Elena vino con su hija y en Ventosa ha adoptado a un perro que apareció abandonado en Navidad.

Ricardo Velasco, alcalde de la localidad y director general de Política Local del Gobierno de La Rioja, apunta que la recuperación de población en el pueblo comenzó con el nuevo milenio, por la carestía de la vivienda en Logroño. «Entonces, en los 2000, hubo un primer 'boom' de gente que vino a vivir aquí. Después nos mantuvimos durante un tiempo, incluso bajamos un poquito, pero después de la pandemia ha habido un incremento importante y han llegado nuevos vecinos, y no gente buscando vivienda barata sino otro tipo de vida. Tenemos buenos servicios y eso la gente lo valora. No superábamos los 200 habitantes desde los 70», advierte Ricardo Velasco. Y eso que en 2021 contaban todavía con más, con 214 censados, y la diferencia con 2019, cuando solo sumaba 159, era todavía mayor. El fondo lo tocó Ventosa en 2002, con solo 121 censados.

Aunque hay urbanizaciones de unifamiliares, construidas décadas atrás, el alcalde de Ventosa atribuye el crecimiento a la compraventa de viviendas ya construidas, ya que no ha habido nuevas promociones inmobiliarias. «Mayoritariamente ha habido compra de casas ya construidas, no ha habido nueva edificación, aunque sí se han rehabilitado algunas viviendas», explica el alcalde. «En los últimos años hemos intentado que la gente que viva aquí pueda tener los mismos servicios que en una localidad más grande, con ludoteca, talleres, clases de refuerzo», explica Velasco. Todo ese ambiente propicia que el municipio albergue actividades como, ayer mismo, el Día del Árbol, pero también el célebre Mercado del Trato o el Kilómetro del Arte. «Toda la gente que hay aquí está muy implicada», asegura Velasco.