El nuevo Plan de FP y Empleo contará con 73,8 millones y se focalizará en los más vulnerables

En la reunión celebrada en las instalaciones de Riojafórum donde en junio del 2020 también se escenificó el acuerdo para la Reconstrucción Económica y Social de La Rioja, Andreu condensó en cinco los ejes del plan: reforzar la orientación e intermediación laboral, impulsar la FP y la formación para el empleo, favorecer las oportunidades de trabajo, garantizar la igualdad de oportunidades y modernizar los servicios públicos de empleo. Todo ello, ante la necesidad de adaptación a un entorno cambiante y con la transformación digital en el horizonte inmediato. Desde esas premisas, la jefa del Ejecutivo coincidió con el resto de firmantes en secundar objetivos como reequilibrar las oportunidades entre el ámbito urbano y el rural, apoyar proyectos de emprendimiento basados en lo local, implementar nuevos modelos económicos sostenibles o incentivar la colaboración público-privada en la prestación de este tipo de servicios. «Nos toca afrontar un contexto económico y social complejo e inédito y se hace preciso redoblar una apuesta responsable que garantice un futuro de progreso, de sostenibilidad y de equidad para la región», aseveró confiada en que el plan, cuyas medidas irán concretándose en función de las necesidades detectadas, sirva para sacar de las listas del paro o mejorar la situación laboral del mayor número posible de riojanos.

Patronal y sindicatos se congratularon tanto del pacto alcanzado como de los propósitos contenidos en el documento. «Nace desde los principios de la colaboración y el consenso, con lo cual está llamado a tener éxito», reflexionó Jaime García-Calzada. El presidente de la Federación de Empresas de La Rioja destacó el «cambio total de concepto» que ha operado la FP y el prestigio alcanzado, seguro de que el plan mejorará las condiciones de los trabajadores y la competitividad de las empresas. Por CCOO, su secretario general, Jorge Ruano, incidió en el capital humano como puntal para secundar un marco laboral estable y de calidad. Un afán que pasa a su juicio por formar al 48% de riojanos en situación de descualificación. «Dar oportunidades a los más desfavorecidos es también redistribución de la riqueza», apostilló antes de que su homólogo en UGT, Jesús Izquierdo, aplaudiera el impulso de la Mesa del Diálogo Social que implica un plan llamado a subsanar un «déficit histórico» en materia formativa. Izquierdo llamó a optimizar los fondos llegados de la UE y responder a las nuevas realidades, «porque modernizar el mercado de trabajo no es una opción, sino una obligación imprescindible».