«La negociación colectiva es el cauce para regular la implantación del teletrabajo»

El secretario general de los ugetistas riojanos, Jesús Izquierdo, reconoce que las actividades donde más alcance está teniendo el teletrabajo son «las más masculinizadas, caso de las tecnológicas y también de algo en el ámbito industrial». Por el contrario, en los sectores más feminizados, «como son los servicios, el teletrabajo es incompatible».

Por tanto, la premisa que no se puede olvidar es que «hay que ser conscientes de que en algunas actividades no es posible implantar» el trabajo a distancia, pero en las que «ha venido para quedarse, estamos obligados a regular las condiciones de su implantación en los convenios colectivos», ya que es el mandato del quinto Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC).

Eso sí. Izquierdo asevera que «teletrabajar no es conciliar». «No se puede utilizar esta nueva forma» de desarrollar la actividad laboral con la pretensión de que sea la solución para «poder simultanear el trabajo con el cuidado de los hijos o de los familiares». Por ello, «esta forma de trabajo debe estar muy regulada» y el acuerdo AENC es «la hoja de ruta que debemos seguir en la negociación colectiva riojana para establecer sus condiciones en los diferentes convenios colectivos».

El pacto nacional también incluye, recuerda el líder de UGT-Rioja, «abordar la reducción de la jornada laboral semanal a cuatro días». En este sentido, explica que ha habido ya alguna experiencia piloto y que su central se reafirma en esta propuesta y en «el reparto del trabajo».

Su homólogo de CC OO en La Rioja, Jorge Ruano, incide en que el AENC «recoge de manera clara que la negociación colectiva es el cauce adecuado para la implantación del trabajo a distancia, adaptándose a las especificidades de cada sector o empresa».

Los datos de implantación del teletrabajo en España «están muy por debajo de la media europea, y esto tiene que ver con el tejido productivo y económico del país, y el peso que tienen ella sectores más tecnológicos o bien de mano de obra intensiva». Pero en aquellas actividades donde sí es posible ponerlo en práctica se «debe negociar para que todos sus convenios colectivos incluyan cuestiones relativas al teletrabajo y a la desconexión digital».