Hace aproximadamente un mes que José Ignacio Aguado fue nombrado Director General de Salud Pública, Consumo y Cuidados del Gobierno de La Rioja. Este médico especialista en Medicina Familiar y del Trabajo lidió durante la pandemia con el COVID en los centros escolares riojanos ... como inspector jefe de los servicios médicos de Educación. A partir de ahora, centrará sus esfuerzos en coordinar y gestionar una de las direcciones más importantes de la Consejería de Salud y en vigilar la evolución del pandemia en los próximos meses.
– Hace relativamente poco tiempo que ha asumido esta responsabilidad. ¿Cómo está siendo la adaptación al nuevo cargo?
– La verdad es que contaba con algo que ha favorecido mi adaptación y es que he trabajado previamente en la Dirección de Salud Pública y, durante la pandemia, he colaborado estrechamente con los servicios de Promoción y Epidemiología. Sobre todo, con Inspección Alimentaria.
«La Ley de Salud Mental es uno de los principales retos que tenemos por delante en el sistema de salud»
«En estos dos años hemos aprendido mucho, a reaccionar con rapidez. Estamos preparados»
– Cuando su antecesor se marchó, todo fueron buenas palabras para su trabajo. ¿Le ha dejado el listón muy alto?
– Eso siempre es bueno. Lo que hay que hacer es continuar con esa línea ascendente que dejó Latasa, para que Salud Pública se modernice. Si algo bueno ha traído la pandemia es que ha dado una nueva visión de la Salud Pública y de su importancia.
– ¿Qué retos se marca en esta dirección?
– He llegado con algunos proyectos ya iniciados pero hay que implementarlos y darles continuidad como la Ley de Adicciones, el Plan de Salud Mental o la Escuela de Salud. Estos días me he dedicado a conocer más a fondo estos proyectos.
– Parece que lo peor de la pandemia ha pasado. Aunque no hay que confiarse, pero, ¿está el sistema riojano de Salud preparado para una siguiente ola?
– Estos dos años hemos aprendido mucho. A responder rápidamente, a tener previstos los protocolos necesarios... En este tiempo nos hemos tenido que adaptar a una situación que era nueva para todos.
– ¿Y ese aprendizaje nos servirá para otro tipo de alertas, como la de la viruela del mono?
– Desde luego, ya tenemos experiencia. No nos puede pillar desprevenidos ningún brote de otro tipo de enfermedad infecciosa. Hemos aprendido a coordinar una respuesta rápida y tener preparadas todas las medidas. Estamos mucho mejor preparados que en anteriores ocasiones.
«No solo es un problema de gestión o de recursos humanos, hay que hacer un estudio global»
«Ha faltado comunicación para lograr hacer atractiva la Atención Primaria para los nuevos médicos»
– Una de las cuestiones que más preocupa a la ciudadanía es la situación de Atención Primaria, ¿cómo solucionar los tiempos de espera a los que se enfrentan los pacientes y la saturación del servicio?
– El gerente del Seris y la Consejería ya han tomado decisiones y están aplicando un plan para adaptarse a una situación que es generalizada en todo el Estado. Creo que la respuesta ha sido rápida, se han tomado medidas en pocos días, y ahora tenemos que esperar a ver cómo funcionan.
– Primaria es una de la especialidades menos elegidas por los nuevos médicos. Este año, solo tres MIR ha solicitado plaza en ella. ¿Por qué resulta tan poco atractiva?
– La verdad es que eso nos los llevamos preguntado mucho tiempo. En mi opinión, nos ha faltado comunicación, trasladar bien las cosas durante la pandemia. Tenemos una visión más generalista de la Medicina, poco orientada la medicina familiar y comunitaria. No se ha explicado correctamente a los profesionales que terminan los estudios de Medicina la importancia de la Atención Primaria, que es el primer punto de contacto con los pacientes, la encargada de la prevención y la actuación a nivel comunitario. Más importante que eso hay pocas cosas.
– El mes pasado, las Urgencias del San Pedro marcaron récord de asistencias que, sin embargo, no se tradujeron en ingresos hospitalarios. Algunos profesionales hablan de la necesidad de un cambio de gestión.
– Esa es la clave. Pero no creo que sea solo un problema de gestión o de recursos humanos. Es necesario realizar un estudio global del servicio de Urgencias y ver por dónde queremos seguir.
– ¿Es necesario concienciar a la ciudadanía sobre cuándo acudir a Urgencias?
– Tenemos programas de Salud y de promoción que están en ello. Creo que este es un proceso con el que tenemos que ir poco a poco, aprender en las escuelas y formarnos en salud, en atención sanitaria. Pero esto no es algo que se haga de un día a para otro. Nuestra misión como profesionales sanitarios es que la sociedad entienda cómo funcionan los diferentes ámbitos del sistema sanitario y cómo hay que utilizarlos.
– Se ha marcado como un desafío importante la Ley de la Salud Mental, un tema que hasta hace poco era tabú en nuestra sociedad. ¿Cómo está avanzando la ley?
– Estamos muy sensibilizados con la salud mental. La pandemia ha mostrado una cara muy poco amigable a las personas más vulnerables. El bienestar emocional de la población infanto-juvenil y anciana ha resultado dañado. Nuestro reto es ayudar, acompañar, desde el sistema sanitario, a todas las personas que lo necesiten. Con respecto a incorporar al sistema más personas, como psicólogos, el Gobierno de La Rioja ha iniciado este Plan de Salud con el cual ha puesto a disposición de los ciudadanos una serie de herramientas. Tendremos que dar los siguientes casos para que garantizar el bienestar emocional de los riojanos y riojanas de una forma rápida y efectiva.
– El sistema de salud ha incorporado recientemente nuevos avances tecnológicos en unidades como Cirugía cardiaca y Nefrología. ¿Se espera reducir así las listas de espera quirúrgicas?
– Todos los sistemas de Salud tienen que fortalecerse y modernizarse. La visión de nuestro sistema sanitario tiene que ser global, no nos podemos quedar atrás en ningún ámbito, ni en el de la formación a nuestros profesionales ni en el de la capacidad tecnológica. Y en eso estamos. Es cierto que en este camino es necesario un proceso de adaptación y esperamos que, a la larga, estas incorporaciones tecnológicas, así como el convenio de colaboración con el sistema sanitario navarro que se firmó recientemente, redunden en el beneficio de toda la sociedad riojana. Con respecto a las listas de espera, vamos a ver cómo estas incorporaciones inciden en ellas. Y en función de los resultados, tomaremos más decisiones. En cualquier caso, todas ellas irán encaminadas en buscar un beneficio para la sociedad riojana.
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