Haro Rioja Voley

«Pasear el nombre de La Rioja por España es un privilegio»

«Increíblemente honrados y felices» se han sentido los componentes del Haro Rioja Voley tras recibir esta distinción. «Siempre hemos dicho que pasear el nombre de La Rioja por toda España era un privilegio, pero también una responsabilidad que nos hace esforzarnos día a día por representar esta gran comunidad lo mejor posible», ha asegurado en San Millán el vicepresidente del club, Ismael Merino. Su discurso ha girado durante buena parte sobre la figura de Lorena Ojeda, la «querida y añorada» jugadora del equipo jarrero que falleció en un accidente de tráfico en 2006, cuando tenía 27 años. «Ese ha sido el peor momento de nuestra historia. No fue perder una jugadora, fue perder una persona excepcional y una gran amiga», ha recordado Merino, 'alma mater' de la entidad.

Ojeda tiene en San Millán, a escasos metros del Monasterio de Yuso donde se ha celebrado el acto institucional del Día de La Rioja, un busto en su memoria. «Y como ella hubiera querido», ha dicho el vicepresidente del Haro Rioja Voley, «vamos a quedarnos con lo bonito». Y con su legado. Y con sus valores. A ellos se ha referido Ismael Merino, en concreto a la humildad, al esfuerzo y la superación. «Lorena era una jugadora increíble, había llegado a ser internacional y tenía un gran palmarés». Pero era humilde y «antes de empezar la pretemporada nos pidió un balón porque quería entrenarse para no defraudarnos». Representaba también el esfuerzo «porque tenía un expediente académico increíble. Lo consiguió entrenando mañana y tarde, asistiendo a clases y estudiando sin descanso». Y fue superándose día a día «para salvar las adversidades». El club «también se ha confundido muchas veces, pero hemos intentando aprender de nuestos errores para poder seguir adelante cada vez más unidos y más fuertes».

El legado de Lorena Ojeda lo cultiva y refuerza a diario una entidad que esta temporada ha aglutinado en su cantera a 250 niños. Aunque su historia tiene ya tres décadas de trayectoria «practicando un deporte no mayoritario, en un lugar pequeño y en su mayor parte practicado por mujeres». Merino ha reivindicado que el deporte femenino «sea igual de valorado que el masculino. Hace treinta años seguramente no era así pero todas las jugadoras que han pasado por el club han conseguido con muchísimo trabajo que se llenen polideportivos y que la sociedad valore todo lo que consiguen. Seguramente falta camino por recorrer para la igualdad total».