El Plan Revive rural acaba por beneficiar sobre todo al entorno de la capital

De hecho, del total de solicitudes registradas en la modalidad de compra por parte de la Consejería de Política Local, Infraestructuras y Lucha contra la Despoblación (a través de la Dirección General de Vivienda), 12 de ellas corresponden a Agoncillo (cifra que representa el 10,2% del total), donde residen menos de 2.000 personas. Le siguen de cerca Nalda, con 9 peticiones; Albelda de Iregua, con 6; y los municipios de Alberite, Autol, Entrena y Murillo de Río Leza, donde se efectuaron 5 solicitudes, respectivamente, en la citada modalidad.

Fuenmayor, Navarrete o Uruñuela reciben una demanda muy similar, con 4 solicitudes de ayuda para afincarse en cada una de estas localidades. Menos éxito experimentan Cenicero (con tres peticiones en esta modalidad), Ezcaray (ídem), Ribafrecha (ídem), Arnedillo (donde se han registrado dos solicitudes para esta subvención), Arrúbal o Corera (ídem). En otros municipios, como Alesón, Cihuri, Sotés, Cellorigo o Zarratón, solo se ha registrado una única solicitud de compra.

La ayuda, en cualquier caso, pretende modificar la desigual distribución de la población en la comunidad, donde el 46,7% de los habitantes residen en la capital riojana (cifra que representa a 150.583 personas, de las 322.490 que componen el censo) y donde casi uno de cada cuatro se aglutinan en los 165 municipios que tienen hasta 5.000 habitantes. La realidad, sin embargo, es que el grueso de las solicitudes efectuadas hasta el momento –la convocatoria seguirá abierta hasta 2027– se concentran en las inmediaciones de Logroño, a menos de media hora en coche.

En relación a estos datos, el consejero de Política Local, Daniel Osés, reconoce que aunque «vemos un importante reparto territorial por el conjunto de La Rioja, el área metropolitana de Logroño está atrayendo población por su ubicación estratégica, porque pueden residir en un pueblo que está cerca de la capital riojana con todos los condicionantes en positivo que implica siempre la vida en el medio rural».

Otro factor que, a su juicio, justifica una mayor demanda en estos pequeños municipios es el «stock de viviendas» que «no se había vendido en los últimos años». De ahí que con esta ayuda «tan importante que ofrecemos a los jóvenes, el área metropolitana siga con su tendencia de crecimiento». Por ello, expone, «hemos querido hacer una discriminación positiva hacia el medio rural, hacia aquellos municipios de menos de 500 habitantes, que disponen de hasta 40.000 euros de ayuda para que los jóvenes puedan tener los medios y los mecanismos necesarios para poder instalarse en cualquier municipio de nuestra comunidad autónoma».

La convocatoria también ofrece una ayuda directa para la autopromoción o rehabilitación edificatoria, pero de momento solo se ha registrado una petición para restaurar una vivienda en Quel. Una coyuntura que, según el titular de Política Local, viene determinada porque estos procesos no son tan rápidos como la compra, que solo requiere de «escriturar y tomar la decisión; porque la rehabilitación y la autopromoción implican la redacción de proyectos y de otros condicionantes».

La confianza del Ejecutivo regional es que estas modalidades reciban «una mayor acogida, especialmente la rehabilitación». Sobre todo, porque hay veces que «falta suelo o vivienda, pero también tenemos casas que se están cayendo. Esperemos que este plan incentive tanto a los propietarios, para que las pongan a la venta en el mercado, como a los jóvenes riojanos para que las pueden rehabilitar». Todo ello, apunta Osés, permitirá que «los cascos históricos de los municipios puedan verse rehabilitados y sus viviendas, renovadas».

Las subvenciones se podrán solicitar durante toda la legislatura para que los jóvenes riojanos «puedan tomar con total tranquilidad una decisión tan importante como es fijar un proyecto de vida en un municipio, porque el Gobierno les va a apoyar». El balance de las solicitudes registradas hasta ahora es «extraordinariamente positivo porque está teniendo una gran acogida». Por ello, servirá «para cubrir las necesidades de vivienda y combatir la despoblación».