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Marqués de la Concordia, una de las sociedades de United Wineries (antigua Berberana), ha entrado en concurso de acreedores, con cinco cooperativas riojanas en su ... accionariado. Marqués de la Concordia Family of Wines está domiciliada en la actualidad en Zamora y es una importante compañía en la comercialización de vino Rioja en volumen, con marcas como Marqués de la Concordia, Federico Paternina o Lagunilla. Según ha podido confirmar este diario, no se trata de un concurso voluntario, sino que ha sido forzado por uno de los acreedores que, al parecer, sería también socios de la propia compañía. Es lo que se denomina concurso necesario.
Marqués de la Concordia se ha visto afectada por la pandemia y, de hecho, había recibido una inyección de 10,3 millones de euros del Fondo de Recapitalización de Cofides, dirigido a empresas afectadas por la crisis sanitaria. El objetivo de este fondo, dotado con 1.000 millones de euros de origen público, era evitar la destrucción de empleo y del tejido productivo a nivel nacional y regional y se dirigía a empresas medianas con ventas entre 10 y 400 millones de euros que, siendo viables, su supervivencia se veía amenazada por los efectos de la pandemia.
El germen de Marqués de la Concordia fue Bodegas Berberana, que fue expropiada a la sociedad Rumasa (Ruiz Mateos) en 1983. Seis cooperativas vitivinícolas riojanas, el Gobierno de La Rioja y Caja Rioja adquirieron la bodega en 1986. En 1997, la cooperativa de Aldeanueva, una de las fundadoras, vendió su participación. Sí continuaron en el accionariado, y de hecho continúan, las cooperativas del Najerilla (Arenzana de Abajo), El Redal, Fuenmayor, Nájera y Alesanco, aunque estas dos últimas llegaron incluso a presentar una demanda contra el equipo directivo, encabezado por Víctor Redondo (quien hace unos meses vendió su participación en la empresa) por supuesto enriquecimiento injusto. Ambas demandas fueron desestimadas por los tribunales y, desde entonces, ninguna de las dos cooperativas mantenía relación comercial alguna con Marqués de la Concordia.
En cuanto a las otras tres, en su momento firmaron importantes contrato de abastecimiento y de elaboración y crianza de vinos con el grupo bodeguero, aunque fuentes cooperativas señalan que aquella relación finalizó por acuerdo entre las partes y que las relaciones actualmente comerciales son mucho más limitadas, y en algún caso incluso inexistentes.
De momento, no se ha publicado aún el concurso de acreedores y fuentes consultadas aseguran que, hasta el momento, no se habían detectado impagos ni a proveedores ni a trabajadores.
Además de en Rioja, Marqués de la Concordia elabora también cavas (Marqués de Monistrol), vinos de Rueda (Vega Reina), Arribes del Duero (Hacienda Zorita) y Vinos de la Tierra de Castilla.
Aunque no es la situación de hace unos años, en los que tres de las cooperativas accionistas tenían una vinculación comercial mucho más estrecha con Marqués de la Concordia, la preocupación por el futuro de la empresa y algunos pagos pendientes está ahí. «Oficialmente», explica Jesús Mari Rivas, presidente de la cooperativa de El Redal, «no sabemos nada; ha sido una sorpresa y por ahora no nos han dado explicaciones».
La cooperativa, que hace unos años años entregaba toda su producción a la compañía, la redujo la vendimia pasada a 750.000 kilos de uva, en todo caso una cantidad importante pero sobre la que hasta ahora aún no se ha llegado a consolidar la deuda: «Se pagó hace unas semanas la primera entrega de 20 céntimos tras la vendimia, como marca la ley, y, en principio, no habría un segundo pago previsto hasta que el vino esté calificado, en marzo del año próximo, pero por supuesto estamos preocupados y hemos tenido varias reuniones de la junta para ver qué va a pasar ahora con una situación concursal y con los pagos pendientes».
Desde la cooperativa de Nájera, por su parte, confirman que desde que presentaron la demanda por enriquecimiento injusto (que fue desestimada) no mantienen ninguna relación comercial con Marqués de la Concordia y lo mismo sucede con la de Alesanco. Fuentes de la cooperativa del Najerilla confirman que sí venden uva o vino, pero bastante menos que antes, mientras que la de Fuenmayor, en principio, no estaría afectada, más allá de la situación de las cinco como accionistas.
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