La locura por las zapatillas de Lidl: de valer 12 euros a revenderse por 2.000 en eBay

La revolución que provoca la compañía cada vez que pone a la venta su robot de cocina Monsieur Cuisine se queda corta en comparación con la locura desproporcionada que se ha desatado en los países europeos donde Lidl ha lanzado esta línea de ropa con diseño corporativo. Una colección que se ha comercializado tanto en tienda 'online' como en establecimientos físicos de Países Bajos, Finlandia, Bélgica o Alemania , creando tal fiebre entre los consumidores que los productos se han convertido en una especie de objeto de culto y ya se revenden en portales como Wallapop y eBay a precios desorbitados.

La colección ha sido un éxito, entre otras cosas, por sus precios asequibles: los calcetines apenas cuestan 0,99 euros, las sandalias y la camiseta salen a 3,99 euros, y las zapatillas se pueden adquirir por apenas 12,99 euros, por lo que resulta imposible encontrar unas semejantes tan baratasen cualquier supermercado o tienda especializada en ropa deportiva. Pero la noticia no es que Lidl haya agotado sus existencias, sino que hay compradores revendiendo estos productos a precio de oro.

Las 'sneakers', que aúnan la tradicional combinación azul, amarilla y roja tan característica del supermercado, son el producto estrella y ya están alcanzando astronómicos precios en la reventa. Algunas de las 'ofertas' más escandalosas que han circulado por las redes socialesponen como precio de salida a las zapatillas de deporte más de 300 o 400 euros. No obstante, la especulación sigue al alza y hay quien está pidiendo 1.255 euros por un par en eBay Francia, mientras que si se navega durante un rato por el sitio web del portal en Reino Unido fácilmente se puede detectar un anuncio en el que se piden 2.050 libras —más de 2.270 euros— por las 'sneakers' y los calcetinescon el logo de la cadena Lidl, que apenas cuestan un euro en Países Bajos o dos en Alemania.

En Finlandia, cuando salieron a la venta en las tiendas físicas, se armó un gran revuelo. Los estantes que albergaban las zapatillas se vaciaron en cuestión de segundos, se formaron infinitas colas y los clientesincluso se saltaron las normas de seguridad para evitar contagios enloquecidos por hacerse con un par. Algunos 'tuits' incluso muestran imágenes de auténtico delirio por conseguir el codiciado diseño. Después de que hace unos años la diseñadora Anya Hindmarch elevara el logo de Carrefour a la categoría de lujo imprimiéndolo en sus bolsos o de que Moschino dedicara una colección completa a McDonald's, parece que ha llegado el turno de las zapatillas de Lidl.

No está del todo claro a qué se debe esta pasión por la nueva línea de ropa de Lidl, que pronto estará disponible en Irlanda y, probablemente, en invierno la podamos ver en España. Algunos piensan que se trata de una moda pasajera o, simplemente, que su éxito radica en unos precios muy bajos. Pero también es cierto que esta cadena de supermercados tiene una gran presencia en toda Europa y cuenta con una legión de fieles clientes.