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Después de la aprobación del estudio informativo, el siguiente paso ha tardado en llegar ocho meses, prueba evidente de que en las grandes infraestructuras los plazos siempre son largos. El Consejo de Ministros, en su reunión semanal de este martes, ha autorizado al Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible la licitación por 16,2 millones de euros (IVA al margen) de la redacción de los proyectos de construcción para renovar el tramo ferroviario Castejón-Logroño del corredor Cantábrico-Mediterráneo de alta velocidad a su paso por La Rioja.
Estos proyectos definirán todas la actuaciones necesarias para adecuar el trazado actual, de 70,5 kilómetros y vía única electrificada de ancho convencional, a unas mejores velocidades máximas con respecto a las actuales para permitir así tiempos de viaje más competitivos, desde los 48 minutos de ahora hasta los 30. Esto será posible consiguiendo velocidades entre 200 y 220 kilómetros por hora, frente a los 140 actuales.
El contrato se divide en tres lotes, que se corresponden con los subtramos definidos en el estudio informativo: Castejón-Calahorra –la variante ferroviaria de Rincón de Soto, de 9,3 kilómetros y con la obra ya en marcha, no es objeto de este contrato–, Calahorra-Alcanadre y Alcanadre-Logroño. Y al ser lotes independientes, las obras pueden empezar de manera individualizada.
Aunque para ello todavía habrá que esperar varios años. Ahora, una vez que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) saque a concurso los proyectos constructivos, la previsión es que para el ejercicio 2027 esos proyectos sean una realidad y que en esa misma anualidad o la siguiente puedan arrancar, por fin, las obras de construcción.
En este sentido, el portavoz del Gobierno regional, Alfonso Domínguez, criticaba los «años de retraso» en el corredor Cantábrico-Mediterráneo «cuando llevamos mucho tiempo reclamándolo porque es estratégico para el crecimiento económico. Esperemos ahora que se avance por parte del Ministerio, pero los proyectos de grandes infraestructuras con afectación para el paisaje debe hacerse con diálogo y consenso con los afectados». Por su parte, la delegada del Ejecutivo central en La Rioja, Beatriz Arraiz, tildó de «buena noticia» esta licitación y destacó el «compromiso del Gobierno de España, que nunca ha dejado de trabajar con estas infraestructuras».
Los proyectos contemplan la renovación integral de la vía –con traviesas polivalente que permitirán cambiar el ancho a estándar en el futuro–, el tratamiento de trincheras y terraplenes, la adecuación de los sistemas de drenaje o la eliminación de los 13 pasos a nivel existentes en el trazado. También se habilitarán vías de apartado de 750 metros en las estaciones de Calahorra y Arrúbal para dotar de versatilidad a la infraestructura en beneficio del tráfico de mercancías.
Esta licitación supone, según el Ministerio, «una pieza clave» en la conexión entre los corredores Atlántico y Mediterráneo de la Red Transeuropea de Transporte, mediante un trazado ferroviario de altas prestaciones para el tráfico mixto de pasajeros y carga.
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