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Las anécdotas, en ocasiones, suelen ser casi tan jugosas como las historias. En la mañana de este lunes, cuando el izado de la enseña nacional iba a dar el pistoletazo a una semana de actos organizados por la Guardia Civil para honrar a su patrona, ... la comidilla en el cruce de Vara de Rey con Gran Vía y avenida de la Solidaridad ha sido la ausencia del presidente de La Rioja, Gonzalo Capellán. ¿Ausencia o incomparecencia?
Pues ausencia no fue, porque estuvo. Pero no participó en el acto. La Guardia Civil ha asumido un error de coordinación en protocolo. Un error de segundos, pero que en estos eventos supone un gran drama... o puede suponerlo.
El presidente de La Rioja estaba desde las 11.50 horas esperando en su coche a recibir la invitación para incorporarse al acto. Como máxima autoridad, debía ser el último en incorporarse, justo por detrás del secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez. Pero este llegó y, en ese momento, un responsable del acto ordenó que comenzase a sonar el himno nacional. Con la música ya en marcha, teóricamente no se puede sumar nadie más al acto. Así que Gonzalo Capellán, que esperaba en el vehículo oficial, no se adhirió a la comitiva.
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El enfado entre los responsables de protocolo del Gobierno de La Rioja fue grande y sonoro. También el del propio Capellán, que se veía privado de participar en el acto. La incógnita de por qué no estaba el presidente era la que se hacían todos en el corrillo de autoridades y la salsa de una mañana por lo demás protocolaria y normal, llena de guiños históricos, desfiles y ciudadanos dispuestos a disfrutar de un acto marcial y muestra de cariño hacia la Guardia Civil.
Pero las tiranteces políticas existentes en todos los ámbitos de la vida española provocan fantasmas en cualquier anécdota. Así que Capellán no estuvo por un error de segundos, y la Guardia Civil le pidió disculpas. Pero ya era tarde para salir del coche y participar en el izado. A cambio, Conrado Escobar, alcalde de Logroño, se convirtió en el protagonista involuntario de una anécdota que tal vez se podía haber solucionado con un poco más de coordinación... o de mano izquierda.
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