Investigadores de la UR desarrollan un sistema de detección temprana del cáncer de páncreas

Investigadores de Química Orgánica de la Universidad de La Rioja han desarrollado un sistema capaz de detectar el cáncer de páncreas en fases iniciales, lo que puede contribuir a un diagnóstico precoz que mejore su esperanza de vida; y, además, trabajan en adaptar esta herramienta al cáncer de próstata.

Hace justo un año, el Gobierno de La Rioja, por boca de la consejera de Salud y Políticas Sociales, María Martín, anunciaba la patente por la UR y el Cibir de dos técnicas para la detección precoz del cáncer de páncreas. Doce meses después los trabajos de investigación han venido a corroborar aquellos resultados que, además, han sido avalados con la inclusión en la prestigiosa revista científica 'Angewandte Chemie' de un artículo titulado 'Detection of Tumor‐Associated Autoantibodies in the Sera of Pancreatic Cancer Patients Using Engineered MUC1 Glycopeptide Nanoparticle Probes', al que la publicación ha incorporado las siglas VIP de «Very Important Paper» («Publicación Muy Importante») además de reconocerlo en el Top Diamante de artículos con mayor impacto mediático. El artículo, además de por los investigadores de la UR, Cibir y del Hospital San Pedro, está rubricado por profesionales de la Universidad de Zaragoza, del Consejo Superior de Investigaciones Científicas y de las universidades italianas de Florencia y Verona y del Instituto Italiano de Tecnología.

«El objetivo de este trabajo es el diagnóstico temprano del cáncer de páncreas y para ello estamos diseñando un sistema de detección que lo hemos validado ya con 20 muestras de pacientes de cáncer provenientes del Hospital San Pedro y 20 muestras de voluntarios sanos y, de momento, el sistema de detección es capaz de decirnos si tenemos muestras con cáncer con mayor fiabilidad que los dos test que se utilizan actualmente en la clínica. Actualmente estamos llevando a cabo los experimentos con mayor número de muestras, hasta 156, de pacientes de cáncer de páncreas y estamos extendiendo también el estudio a pacientes con cáncer de próstata, con la idea, en los próximos meses, de diseñar un prototipo que podría incluso utilizarse en la clínica por personas que no necesitarán una digamos una cualificación determinada, ya que simplemente a través de una muestra de sangre y en menos de dos horas podríamos decir con una mayor fiabilidad si un paciente muestra cáncer de próstata o de páncreas», ha explicado Francisco Corzana, líder del grupo investigador de la UR, en la presentación del nuevo sistema, en una comparecencia en el Complejo Tecnológico de la UR en la que también han participado el vicerrector de Política Científica de la Universidad de La Rioja, Eduardo Fonseca; la presidenta de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) en La Rioja, Elena Eguizábal; el catedrático de Química Orgánica de la UR Jesús Manuel Peregrina; y el jefe de la Unidad de Angiogénesis del Cibir, Alfredo Martínez.

El equipo investigador cuenta con 82.800 euros de financiación que la Agencia Estatal de Investigación del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades le ha concedido, dentro de la convocatoria de 'Prueba de Concepto', para desarrollar un dispositivo de diagnóstico temprano, no invasivo y fiable del cáncer de páncreas. Además, la Fundación General de la Asociación Española contra el Cáncer ha aportado otros 180.000 euros, dentro de la convocatoria de AECC INNOVA, para desarrollar un prototipo similar pero adaptado al cáncer de próstata, que consistiría en un análisis sencillo de suero en pacientes, con el potencial de mejorar la supervivencia y aliviar la ansiedad asociada a los falsos positivos.

«Nuestro sistema de detección, por ahora solo con 40 muestras, presenta unos resultados muy prometedores en el sentido de que el número de falsos positivos y de falsos negativos ha disminuido notablemente respecto a los dos biomarcadores que se utilizan actualmente», ha incidido Corzana, quien ha explicado que el equipo de investigadores ha desarrollado un dispositivo basado en la detección de anticuerpos asociados a tumores de origen natural contra la glicoproteína mucina-1 (MUC1) presente en las células tumorales. Para ello, han utilizado unos nuevos biosensores o sondas que consisten en la unión de nanopartículas de oro a glicopéptidos artificiales, diseñados en los laboratorios de la UR.

En concreto, han diseñado una colección de varios glicopéptidos capaces de unirse a anticuerpos monoclonales, como el SM3 o 5E5. Estos antígenos modelo se unieron a nanopartículas de oro y se utilizaron en un ensayo de transferencia puntual para detectar autoanticuerpos en muestras de suero de pacientes con cáncer de páncreas y voluntarios sanos. Las sondas de nanopartículas con glicopéptidos que mostraban el epítopo del anticuerpo SM3 no tenían potencial de diagnóstico. En cambio, las sondas de nanopartículas que muestran glicopéptidos con alta afinidad por el anticuerpo 5E5 podrían discriminar entre pacientes con cáncer y controles sanos.

Jesús Manuel Peregrina, catedrático de Química Orgánica, ha comparado el dispositivo desarrollado con un ejemplo gráfico, un «anzuelo de pesca de anticuerpos» presentes en el cuerpo humano de una persona ya enferma de cáncer: «Hemos mejorado ese anzuelo haciendo pequeñas modificaciones químicas para que el anzuelo sea más apetitoso» y, así, poder detectar el cáncer de manera temprana. «Es como si fuese un imán que es mucho más potente».

Este dispositivo, que ya ha sido probado con suero de pacientes sanos y otros que han desarrollado la enfermedad, reduce el número de falsos positivos y falsos negativos «en comparación con otros sistemas de detección que se utilizan actualmente». No obstante, consideran que «esto no quiere decir que este dispositivo vaya a desbancar a los actuales, sino que complementaría a los actuales, evitando el número de biopsias innecesarias» y mejorando la esperanza de vida de los pacientes, al ver diagnosticada su enfermedad en «etapas muy muy iniciales».

El equipo de investigación trabaja ahora tanto en la prueba de concepto, financiada por la Agencia Estatal de Investigación, para desarrollar el prototipo; como en un nuevo proyecto financiado por la Fundación General de la Asociación Española Contra el Cáncer para adaptar este dispositivo a la detección temprana del cáncer de próstata.

«Desde el Cibir hemos participado en este proyecto sobre todo reclutando las muestras de pacientes, todos ellos riojanos gracias a la colaboración del Hospital San Pedro, que es una maravilla», ha resaltado el jefe de su Unidad de Angiogénesis, Alfredo Martínez, quien ha señalado que «ahora mismo se está ampliando el número de muestras y para ello estamos utilizando una institución muy importante, como es la de los biobancos, donde se van acumulando muestras de sangre de distintos pacientes. En concreto se está haciendo ahora el estudio con esas casi 160 muestras, que son de pacientes con cáncer de páncreas ya definido, de personas con alto riesgo de tener la enfermedad y, finalmente, de personas sanas. En ese paso a la detección temprana del tumor es muy importante la posibilidad de contar con muestras de personas que sabemos que no tenían cáncer pero que eventualmente lo van a desarrollar, es fundamental poder disponer de esas muestras de personas sin la enfermedad pero que a lo largo del ensayo la desarrollen y que hayamos sido capaces de predecirlo, lo que ha sucedido ya en dos casos».

La incidencia del cáncer de páncreas es relativamente baja, creo que está en el número 11 de entre todos los cánceres en cuanto a incidencia, pero el problema es que tiene una muy alta mortalidad, de hecho la supervivencia a 5 años es muy muy baja, del orden del 8 al 10% porque se detecta en fases avanzadas, por eso es tan importante el desarrollo de un sistema de cribado para la detección temprana.

Mientras, Eduardo Fonseca, vicerrector de Política Científica de la UR, ha aseverado que «es un verdadero placer estar aquí para defender una investigación de frontera, una investigación de excelencia y sobre todo una investigación con un claro compromiso social que responde a esos desafíos de la sociedad y en este caso a un tema tan importante como es el cáncer y mejorar el bienestar y el progreso social. Es un hito que responde a esas necesidades de hacer una investigación de vanguardia, excelente, responsable, inclusiva y, sobre todo, focalizada en las personas, que es lo más importante».

Finalmente, Elena Eguizábal, presidenta de la AECC en La Rioja, se ha felicitado porque «una vez más hoy estamos hablando en La Rioja de Investigación en cáncer, es un lujo estar en un centro como la Universidad de La Rioja y con este equipo tan maravilloso haciendo la presentación de un artículo muy importante sobre la detección temprana del cáncer de páncreas».

«Esto es posible gracias a todo el trabajo investigador y al que desde Asociación Española Contra el Cáncer contribuimos con nuestro granito de arena, porque el origen de este estudio está también en las cabezas de dos personas que han sido becadas por la AECC para hacer su tesis predoctoral, Alicia Asín y Carmen Bretón,», ha añadido la presidenta de la AECC en La Rioja, quien ha concluido que «la investigación de hoy es la medicina del mañana y la esperanza de muchos pacientes de cáncer».

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