«Desde que se instalaron las cámaras no entran en las casas y los vecinos se sienten seguros»

Una situación preocupante, sobre todo «por la seguridad y el patrimonio de los vecinos», que le llevó a instalar un sistema de videovigilancia. «Estaba preocupado por los vecinos y por los residentes que habían elegido ir a Cihuri con su familia, a los que les quería ofrecer un municipio en el que pudiesen sentirse seguros».

Para ello, «hablé con la Guardia Civil de Casalarreina, porque la vigilancia no era de mi competencia, y me recomendó disponer de cámaras de seguridad. Como se repitieron los casos, decidimos ponerlas para poder protegerlos». Instalaron seis cámaras, pero la resolución de la Delegación del Gobierno –aprobada el pasado mes de julio– tan solo le autorizó el funcionamiento de cinco de estos dispositivos.

Desde entonces, estas cámaras, que están situadas en varios puntos estratégicos –determinados por la Benemérita–, como son el casco antiguo o el parque de la Ermita, cumplen con su principal propósito de evitar los hechos delictivos. «Puse señales a la entrada y salida del pueblo para indicar que disponemos de un sistema de videovigilancia y, desde entonces, ha tenido un efecto disuasorio. De hecho, desde que se instalaron las cámaras, no hemos vuelto a tener problemas de entradas en las casas». Un sistema que, de hecho, también ha sido bien acogido dentro del municipio. «Los vecinos me han manifestado varias veces que se sienten más seguros tras la implantación de las cámaras», reconoce satisfecho el alcalde.