La inflación amenaza «la viabilidad de la mitad de las empresas», avisa la Cámara

Así lo advirtió este martes el director general de la entidad, Florencio Nicolás, durante la presentación del documento, en una rueda de prensa en la que también estuvo presente la responsable del departamento de Análisis, Cristina Navarro, quien confirmó que, aunque el saldo del segundo trimestre, exceptuando los precios y la debilidad de la demanda, fue positivo, el tercer trimestre augura «una desaceleración económica».

Nicolás anticipó una «contracción» de la actividad industrial en un nuevo contexto de subida de tipos de interés con el que «se ha acabado el dinero barato». «La mayor dureza en los requisitos exigidos para acceder a la financiación y la limitación del crédito» van a «tener consecuencias en las empresas y en las familias». Y es que «va a haber menos dinero disponible, lo que frenará la demanda, elevará los costes financieros» y «puede hacer peligrar las inversiones programadas en el 82,5% de los casos».

El encarecimiento del dinero es una de las medidas adoptadas por las autoridades monetarias para frenar la inflación. Pero ha llegado en un momento en el que «la mitad de las empresas riojanas no ha recuperado» el volumen de negocio que presentaba antes de la pandemia, y seis de cada diez califican como mala o regular su situación financiera, lo que evidencia «un alto grado de vulnerabilidad».

Para el 93,2% la inflación es «el principal riesgo a medio plazo». De hecho, el 89,8% de los consultados por la Cámara ya ha visto afectados negativamente sus márgenes y el 54,4% ve en riesgo la viabilidad de sus negocios. Asimismo, siete de cada diez consideran que la situación de los precios no es transitoria, y el 86,4% teme que puede convertirse en estructural «si se toma el IPC como referencia en la negociación salarial», que es una de las principales reivindicaciones de los sindicatos con representación en las mesas del diálogo social.

Para ninguna de las cuatro variables que testa la Cámara (ventas, inversión, empleo y precios de venta) se prevén valores positivos en el tercer trimestre, síntoma de que la economía «se ralentizará».

Ante esta situación, la Cámara de Comercio reclama «poner en el centro de las políticas económicas» a las empresas, que son «las que crean empleo y crecimiento». Y, antes de recurrir a subidas de impuestos, pide «una mejor y más eficiente gestión del gasto público» y «luchar contra la economía sumergida».