Violeta Dimitrova | Peluquera de origen búlgaro

«Es imposible ahorrar, pero seguiré luchando»

Los comienzos no fueron nada fáciles. Todo debido, en parte, a que «tuve que montar toda la peluquería –situada en avenida de Colón, 11, en Logroño– y sacar todos los certificados para poder trabajar». «Fue muy duro, porque al principio no te conoce nadie. Casi estuve trabajando los primeros años para la peluquería, para pagar mis gastos, ya que si sacaba algo, era muy poquito», asegura Dimitrova.

Con el paso del tiempo, fue consiguiendo «poquito a poco» a sus clientes más fieles, aunque todo cambió desde la irrupción del covid. «Después de la pandemia han bajado mucho los clientes y, ahora, se nota todavía más que la gente no tiene dinero, que ya no es como antes..., que los que venían todas las semanas ahora solo lo hacen una vez al mes porque influyen mucho los precios y las subidas de las hipotecas».

A pesar de su dilatada trayectoria, «sigo trabajando sola, porque no me puedo permitir tener a nadie, y me organizo muy bien mis horas», reconoce Dimitrova mientras apunta que a la dificultad que afronta el sector de reducir el IVA «aunque sea al 10% para evitar cerrar el negocio» también se suma que, como autónoma, «no puedo ahorrar nada, es imposible por cómo están los precios, porque te da lo justito para pagar los gastos». De hecho, hay veces en las que incluso afronta «mucho estrés» porque «hay días en los que hay poca gente, que se acerca el final del mes, te viene el gasto del agua, del alquiler, y no sabes si vas a llegar... una situación que es complicada para todos». Dimitrova, a pesar de cualquier dificultad, indica que sigue «con mucha ilusión». «Me encanta mi trabajo, lo disfruto y voy a seguir luchando para salir adelante hasta que pueda, pero deberían ayudar más a los autónomos».