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El comportamiento «cívico» que, en palabras de la delegada del Gobierno, tuvieron los agricultores y ganaderos que salieron este martes a las calles y carreteras de La Rioja -para protestar por la situación del sector agrario en una movilización «histórica»- está empezando a dejar de ... serlo. Beatriz Arraiz ya habla de actitudes «irresponsables» y de líneas rojas que «no se pueden cruzar» y que en la mañana de este miércoles, en la segunda jornada de protesta -de las muchas que, en principio, están por llegar-, ya se están rebasando.
Arraiz ha elevado el tono cuando se ha referido a lo que ha sucedio al filo de las 11.00 horas en la autovía A-12 a altura del polígono de Lentiscares de Navarrete. Por este tipo de carreteras, al igual que por las autopistas, no está permitida la circulación de los tractores. Y quienes iban a bordo de estos vehículos, alrededor de 200 agricultores y ganaderos, se han bajado de ellos y se han adentrado a pie en la calzada cortando la vía en ambos sentidos. «Eso no se puede permitir, es un comportamiento rechazable. Están poniendo en peligro su propia seguridad y la de los conductores que circulan por la autovía», ha asegurado la representante en La Rioja del Gobierno de Pedro Sánchez. La Guardia Civil ha identificado a estos dos centenares de personas, les ha pedido la documentación y ahora se elaborará el correspondiente informe que puede acabar en una propuesta de sanción.
A este incidente, el de mayor gravedad en este día y medio de movilización, se ha unido otro que ha ocurrido cerca de otra zona industrial, en este caso el polígono La Portalada de Logroño. Alrededor de 40 manifestantes, según los datos aportados también por Beatriz Arraiz, han sido identificados -el procedimiento será el mismo que en el caso del corte de la A-12- por la Policía Nacional por intentar cortar la vía que da acceso al complejo industrial en su punto de unión con la LO-20. Sin embargo, este incidente ha sido desactivado con rapidez.
«Hasta ahora se ha sido permisivo con el comportamiento que han tenido los agricultores y ganaderos que se están manifestando, con unas movilizaciones que hay que recordar que no han sido comunicadas a esta Delegación de Gobierno. Pero lo que no vamos a permitir es que se ponga en peligro la seguridad de nadie ni que se corten los accesos al Hospital San Pedro en Logroño o al Hospital de Calahorra», ha reiterado la delegada visiblemente enfadada. Incluso ha hecho un «llamamiento a la responsabilidad» porque de lo contrario «habrá que tomar nuevas medidas», se supone que más contundentes.
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