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Encenderse un pitillo en una terraza de un bar o hacerlo mientras se está viendo un partido de fútbol en un estadio parecía que tenía los días contados. La ministra de Sanidad, Carolina Darias, anunció el pasado mes de octubre el Plan Integral de Prevención ... y Control del Tabaquismo 2021-2025 que, como su enunciado indicaba, debió de haber entrado en vigor el año pasado. El texto incluía importantes restricciones para avanzar en la consecución de más espacios libres de humo. Es por ello que preveía la prohibición de fumar en terrazas y vehículos particulares. Un avance en la lucha contra el consumo de tabaco en la que Sanidad planteó la posibilidad de incluir una subida del precio del tabaco, retirar el nombre y los logos de las compañías tabacaleras en las cajetillas y equiparar el cigarrillo electrónico al cigarro común. Sin embargo, el nuevo plan no incorporaba otras medidas más avanzadas y severas con las que así cuentan otros países europeos.
Pese al revuelo causado, especialmente en el sector de la hostelería, el nuevo plan antitabaco continúa en la actualidad guardado en un cajón. De ver la luz podrían ser retirados los aspectos más controvertidos de la nueva normativa e incluso no ser ni siquiera aprobados. Si bien esto podría ser una buena noticia para los hosteleros, los profesionales ponen el grito en el cielo ante la falta de concreción de Sanidad. «Lo que realmente necesita el sector es una ley antitabaco para toda España», asegura Francisco Martínez Bergés, presidente de Hostelería Riojana de la Federación de Empresas de La Rioja.
«En la actualidad, cada comunidad autónoma tiene su propia normativa en cuanto a restricciones sobre el consumo de tabaco en terrazas, y esto hace que nos volvamos locos porque no sabemos claramente si podemos permitir fumar o, por el contrario, debemos apercibir al cliente cuando se enciende un cigarro», plantea. Para dejar claras las posiciones, tras el final de las restricciones motivadas por la pandemia, los hoteleros exigieron a la administración autonómica una «explicación por escrito» sobre la totalidad de la normativa COVID que afectaba a las terrazas en La Rioja.
Sin embargo, lejos de acabar ahí con la confusión siguieron los problemas con la llegada de turistas de otras regiones que preguntaban si está permitido fumar en la terraza. Si a esto se le añade el posible cambio de criterio del Ministerio de Sanidad con las medidas del futuro plan antitabaco, Martínez Bergés realiza a una petición a Carolina Darias. «Deje de volvernos locos, queremos vivir sin miedo por si no estamos cumpliendo con la ley o por si nos van a denunciar», apunta. Y añade: «Las cosas claras para todos, no para una comunidad sí y para otra no».
El presidente de los hosteleros apela a la responsabilidad y a la libertad individual para poder fumar en una terraza. «¿Quién tiene más derechos, la persona que quiere fumar o la que no?», se pregunta y recuerda a los clientes que no deseen estar al lado de un fumador que pueden trasladarse dentro de los establecimientos donde sí está prohibido fumar.
Francisco Martínez Bergés
Presidente de Hostelería Riojana de la Federación de Empresas
Elena Eguizábal
Presidenta de la AECC en La Rioja
Para Elena Eguizábal, presidenta de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) en La Rioja, la posible retirada del plan antitabaco es una pésima noticia. «Estamos decepcionados. Creemos que las personas tienen derecho a respirar aire puro. Por eso hemos impulsado el plan para que haya más espacios sin humo, porque una persona que fuma contamina un área muy grande alrededor de otras que no pueden decidir respirar ese aire o no».
Desde la asociación califican las posibles dudas del Ministerio de Sanidad como un «retroceso» y creen que detrás de ellas podría estar un posible conflicto de intereses con el sector de hostelería. «Es un asunto delicado. Cualquier cambio siempre suscita perjuicios en diversos ámbitos, y en este creo que se refiere al de los hosteleros», señala Eguizábal. «Hace muchos años el Gobierno fue muy valiente prohibiendo fumar en el interior de los locales aunque eso formara mucho revuelo», reflexiona.
Ante la eventualidad de que el plan no contemple las medidas más restrictivas o incluso sea retirado, entes como la AECC tienen claro que van a seguir trabajando para proteger a las personas ante cualquier elemento que pueda generar problemas de salud. «Debemos lograr más espacios sin humo en las ciudades», dice Eguizábal, porque «la salud está por encima de cualquier cosa».
Como recuerdan desde la AECC, el tabaco está detrás de 70% de los tumores cancerígenos y cada año mata en España más de 50.000 personas. Además, es el responsable del 30% de los casos de cáncer y hasta de 20 tipos diferentes de tumores. «Debemos proteger a los más vulnerables como los niños, porque casi el 72% de ellos están expuestos al humo del tabaco», señala su presidenta, Elena Eguizábal. La asociación habilitó la web acuerdocontraelcancer.com, con el objetivo de reunir 300.000 firmas y remitirlas al Congreso de los Diputados para seguir insistiendo en la necesidad de aumentar los espacios sin humo como terrazas, los entornos escolares y los espacios deportivos.
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