Herrera, el asesor manchego que llamó «zorra» a Cospedal, director general

Nacido en Ciudad Real en 1992, según el currículum difundido ayer por el Gobierno regional, «posee estudios de grado en Derecho», así como un máster de acceso a la abogacía por la Universidad manchega. Herrera, que ha ostentado distintos cargos en Podemos de esa región, alcanzó cierta notoriedad cuando publicó en el 2012 en una red social varios mensajes insultantes a la entonces presidenta de Castilla-La Mancha Dolores de Cospedal.

En uno de ellos, textualmente afirmaba lo siguiente: «Usted es un espécimen a investigar. Tiene apariencia de ser una zorra pero escupe como una víbora». En otro, aún iba más lejos, incluyendo una falta de ortografía: «Lo cierto es que tienes una piel muy bonita. De hay (sic) se podría sacar un precioso abrigo de zorra». Y añadió: «No es que te odie, pero si tuvieras un incendio en tu casa y tuviese agua me la bebería». Herrera, quien también era hasta ayer concejal en Ciudad Real y decidió dimitir de su puesto, declinó hacer declaraciones a Diario LA RIOJA. En una breve conversación telefónica se limitó a considerarse víctima de «una caza de brujas», que no concretó.

En su nuevo cargo le acompañará en la Administración regional su colaborador Axier Amo, llegado como él desde Castilla-La Mancha para asesorar a la formación morada en sus contactos con el PSOE. Amo ocupará el cargo de jefe de gabinete de Romero, a quien acompañará como directora general de Cooperación y Derechos Humanos Mayra Moro (1974), una licenciada en Periodismo cuya biografía facilitada por el Gobierno riojano destaca su perfil como especialista en Relaciones Internacionales, con un máster por la Universidad Autónoma madrileña. Moro ha sido asesora del Grupo Parlamentario de Podemos en el Congreso.

Su nombramiento no completa aún la nómina total de altos cargos que desembarcará en la cartera de nueva creación, a la medida de Romero. Queda pendiente saber quién se ocupará de las competencias en materia de memoria histórica, cargo al que apunta Sara Carreño. Y queda también por definir la ubicación física de la Consejería, todavía sin sede.