Guía para no tener problemas con amigos y familiares con la Lotería de Navidad

Muchas personas, por comodidad, evitan perder tiempo haciendo cola en las administraciones de Lotería más conocidas y optan por hacerlo en Internet. Por ello, la organización de consuidores aconseja que el décimo se compre solamente en páginas oficiales de una administración de lotería autorizada para evitar fraudes.

También se pueden adquirir directamente en la web de Loterías y Apuestas del Estado. En ese caso, se deberá elegir un punto de venta asociado, que puede ser cualquiera de las administraciones de lotería que hay en España.Al comprar online se recibirá un comprobante electrónico de los décimos adquiridos. Ese documento electrónico tiene la misma validez legal que el décimo en papel y acredita que se es el propietario del boleto. Los décimos originales se depositan en la caja fuerte de la administración de lotería.

Si se comparte lotería, basta con que el depositario del décimo lo fotocopie y entregue a cada participante una copia firmada con el nombre y el DNI del depositario. Además, deberá indicar que esa persona juega en ese número, serie, fracción y sorteo, una cantidad de euros determinada.

También es válido enviar una foto del décimo por email o WhatsApp. En este último caso, los mensajes pueden ser una prueba, siempre y cuando aparezcan los datos del depositario, los participantes y la participación de cada uno. No obstante, si la otra parte impugna esa prueba por considerar que se ha manipulado, habría que demostrarlo.

A veces un miembro de la pareja decide cobrar por su cuenta el décimo y no compartir las ganancias. La OCU asegura que es un conflicto bastante común en situaciones de ruptura. Es conveniente saber que si el matrimonio es en gananciales, se reparte el 50% para cada uno. Por el contrario si el régimen económico es de separación de bienes, el premio es del que lo ha comprado, salvo que se pueda acreditar que se ha adquirido a medias.

En caso de pérdida o robo del décimo es fundamental acudir a una comisaría de la Ertzaintza, Policía Nacional o Guardia Civil del lugar donde ocurrió el hecho. En la denuncia se debe hacer constar el mayor número de datos posible y todas las circunstancias del hecho, así como aportar posibles pruebas como fotos o fotocopias del décimo en las que se identifique claramente el documento número, serie y fracción. Además, hay que comunicar por escrito el hecho al organismo Loterías y Apuestas del Estado. Con la denuncia se puede paralizar el pago hasta que el juez resuelva quién es el verdadero dueño.

Si el décimo se estropea, por ejemplo porque se cuela en la lavadora, hay que enviarlo a la Sociedad Estatal Loterías y Apuestas del Estado, que determinará si se puede cobrar el premio. Y si está muy irreconocible, será la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre la que se pronuncie. En esos casos, no hay que intentar recomponerlo, sólo entrégarlo en un sobre de plástico. Y en el peor de los casos, los tribunales atienden a otras pruebas para dictar el abono del boleto como el hecho de que nadie lo reclame, el análisis de los fragmentos o el testimonio del vendedor.

A la hora de cobrar el décimo, hay que identificar en el banco a cada ganador y su porcentaje de participación. Una vez hecho esto, las entidades pueden abonar el premio entero, después de descontar el importe por el cuál se tributa, se realizará en la cuenta de la persona que ya es titular en ese banco o caja de ahorros y que después repartirá según lo convenido. Eso sí, nunca se debe cobrarlo todo sin identificar a los otros participantes, ya que al repartirlo puede parecer que se está donando el dinero, lo que obligaría al pago del impuesto de donaciones.

Si el premio es inferior a 2.000 euros se puede cobrar en cualquier punto de venta de la red de Loterías. A partir de esa cifra, hay que hacerlo en una de las entidades bancarias colaboradoras, que puede encontrar en la web de Loterías y Apuestas del Estado. Estos bancos y cajas de ahorro no podrán cobrar ninguna comisión, ni exigir contraprestación.

Si el décimo es compartido, hay que tener en cuenta que Hacienda retiene automáticamente el 20% de la parte del premio que exceda del mínimo exento de 40.000 euros por cada décimo, no por cada persona agraciada. Es decir, se descuenta el impuesto y después se reparte la cantidad neta entre los partícipes. El premio no se declara en el IRPF, los rendimientos que genere, sí.

Si se ha comprado el décimo premiado por Internet, y el premio es inferior a 2.000 euros, se ingresará el importe de manera automática en tu cuenta de usuario: posteriormente se podrá transferir a la cuenta bancaria que se dese. Los premios superiores a esa cantidad solo será posible cobrarlos en una entidad bancaria que sea colaboradora de Loterías y Apuestas del Estado. Para ello, habrá que ponerse en contacto con la administración de loterías en la que está depositado tu décimo premiado, ya que será necesario que se acredite la identidad.

-Guardar los décimos y hacer fotocopias del anverso y del reverso.

-Si se comparten décimos, hacerlo constar por escrito o en un soporte duradero. Las palabras se las lleva el viento y en caso de conflicto no sirven como prueba.

-Si se encargan o se intercambian décimos enteros, hay que procurar recogerlos y pagarlos antes del sorteo.