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El Departamento de Educación del Gobierno vasco ha puesto en marcha el procedimiento para sancionar a la empresa Serunión, encargada de servir los menús en los colegios públicos de la zona rural de Álava, por «una infracción grave». La decisión llega después de que se ... hayan encontrado «microorganismos» en la comida que se sirvió a los alumnos de Ikastota Ikasbidea Durana el pasado 22 de septiembre, el mismo día en el que se detectaron larvas en colegios de La Rioja. Y no es un incidentes aislado, ya que según ha confirmado la AMPA del centro a EL CORREO, desde que comenzó el curso se han registrado otros 111 incidentes relacionados con la comida que se sirve a los escolares. Todos ellos están siendo investigados por el departamento que lidera Jokin Bildarratz.
Según un comunidado que ha enviado la dirección Ikasbidea a los padres, «el 22 de septiembre algunos alumnos informaron de que la pasta que se sirvió en el comedor no era comestible y de que algunos habían visto lombrices». Se recogieron muestras «para remitirlas al laboratorio y en el plazo de 24 horas la dirección de Gestión Económica interpuso requerimiento a Serunion, «solicitando los datos de sus proveedores e información sobre la trazabilidad total de la pasta». También se recogieron muestras de las comidas servidas durante toda la semana. «Ese mismo día la empresa que presta el servicio comunicó la suspensión definitiva de las relaciones comerciales con el proveedor».
El 29 de septiembre «tuvimos una inspección del Departamento de Salud en el comedor de Ikasbidea» y el mismo día «dada la gravedad del asunto» la directora de Gestión Económica se reunió con representantes de Serunion a quienes se informó de la inspección realizada por el departamento de Salud en Ikasbidea. Los resultados definitivos se recibieron el pasado día 6 de octubre, y confirmaban «indicios de microorganismos en la pasta», aunque «en el resto de muestras analizadas no se detectó presencia alguna».
El incidente ha hecho que se plantee la posibilidad de rescidir el contrato con la firma, algo que se ha descartado tras ser consultado con la asesoría jurídica del servicio y los departamentos de Sanidad y Hacienda y Contratación. «Los técnicos de ambos servicios consideran que la incidencia no es suficiente para romper el contrato con la empresa. En lugar de ello, se recomienda aplicar las sanciones económicas establecidas en los pliegos», detalla el comunicado de la dirección de Ikastola Ikasbidea Durana.
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