El Gobierno Vasco multa a Serunion con 25.000 euros por comida en mal estado en un colegio de Hernani

Desde comienzos de curso, las críticas a la calidad de la comida y del servicio de esta firma se han sucedido tanto en Gipuzkoa como en Álava. Preguntado por esta cuestión, el consejero Jokin Bildarratz ha dado a conocer en el pleno de control celebrado esta mañana en el Parlamento Vasco que su departamento ya ha resuelto dos expedientes sancionadores contra la empresa Serunion con dos sanciones de 40.000 y 25.000 euros respectivamente; las referentes a Durana, que ya se conocía, y Hernani.

Además, ha indicado que «se está en proceso de adopción de otras medidas» contra esta empresa. Aunque no ha entrado en detalle, cabe recordar que el pasado 10 de noviembre el consejero Jokin Bildarratz dio la orden de abrir un expediente de resolución de contratos con Serunion después de que se registraran nuevos incidentes por el deficiente estado de los alimentos que esta firma reparte entre los escolares de Primaria (6-12 años) y Secundaria (13-16). Aún no se ha rescindido ningún contrato ya que el plazo para hacer efectiva una resolución de contrato es de dos meses, tal y como informó entonces el Gobierno Vasco.

Hasta la fecha, la empresa sirve a 17 centros educativos en Gipuzkoa. En la ikastola de Hernani las quejas por la comida comenzaron el pasado mes de noviembre, coincidiendo con el cambio de proveedor. «Está mala y pica», empezaron a quejarse de forma generalizada los alumnos. La aparición de larvas en el menú que la firma sirvió en Durana provocó el planté de los padres, que llegaron a mandar a sus hijos con bocadillos a la ikastola para que no tuvieran que alimentarse con la comida de esta firma.

A raíz de estos casos, durante la sesión parlamentaria de este viernes EH Bildu y Elkarrekin Podemos han criticado la gestión del Gobierno Vasco por la situación de los comedores escolares. Bildarratz ha indicado que desde su departamento son «conscientes de las incidencias, pero no se puede poner en cuestión todo el modelo». El consejero ha defendido el «control diario» que se realiza a la comida que se sirve en los comedores. «Las incidencias detectadas no han supuesto riesgo para nuestro alumnado. El producto no se sirve a la mesa y se retira», ha asegurado.