La generación eléctrica dispara la demanda de gas

Entre enero y abril de este año, según los datos del operador nacional Enagás, La Rioja consumió 1.916 gigavatios-hora (GWh) de gas, el 27,9% más que en el mismo período del año anterior. Se trata de la única subida por comunidades, salvo Castilla-La Mancha, aunque en este caso con un aumento más modesto del 1,6%. La evolución alcista de la demanda en La Rioja contrasta con los descensos generalizados en el resto de autonomías, entre los que destacan, en términos relativos, los anotados por el País Vasco (caída del 32,2%), Murcia (-30,5%) y Cantabria (-29,7%).

¿Qué es lo que explica este aumento tan excepcional del consumo de gas en La Rioja? Por un lado, el pulso económico y el frío de los meses de enero y febrero, ya que la demanda convencional, esto es, la que realizan las empresas y los hogares, creció el 11% en los cuatro primeros meses de 2023. Pero, sobre todo, el consumo de gas para producir electricidad, que ha repuntado el 53% respecto al primer cuatrimestre de 2022.

Y es que el ciclo combinado se situó el año pasado (un ejercicio desastroso para la energía hidráulica) como la principal fuente de electricidad en la región. Su producción rozó los 1,2 millones de megavatios-hora (MWh), valor que no registraba desde 2019.

Y el arranque de 2023 (Red Eléctrica de España sólo tiene datos hasta el mes de enero) fue similar: la producción del ciclo combinado ascendió a 128.066 MWh, casi la mitad del total de la electricidad producida en la comunidad en enero. Fueron 14.595 MWh más que la eólica, que se mantuvo como segunda fuente. A esta le siguieron la hidráulica (10.337 MWh), la solar-fotovoltaica (6.601) y la cogeneración (3.436).