Los gatos también nos 'hablan'

Un ronroneo, el modo de tumbarse o qué hacen en el arenero son conductas felinas que a menudo pasan desapercibidas como algo normal para los dueños de gatos pero, en realidad, son una forma de comunicación. Los gatos utilizan su cuerpo como principal medio de comunicación con sus dueños, manifestando así sus emociones y estado de ánimo. Su lenguaje corporal se manifiesta por medio de posturas, gestos, movimientos y sonidos. «Todas las falsas creencias acerca del gato provienen, principalmente, de la falta de comprensión de su lenguaje», expone la etóloga felina Celia Ballesteros en su libro 'Gatos. Manual de instrucciones', en el que asegura que pueden emitir un centenar de sonidos distintos.

La marca de arenas para gatos Sanicat cuenta con la riojana Celia Alesanco para descifrar los comportamientos de los gatos. «El abanico de gestos de los felinos es muy amplio. Incluso cuando están descansando nos están comunicando cómo se encuentran. Los gatos pasan alrededor de 15 horas descansando, por ello, los despertares tempranos son comunes en los hogares con gatos debido a la falta de estímulos durante el día», indican desde Sanicat, desvelando que si el felino duerme hecho una bola, es que quiere conservar el calor; si lo hace panza arriba, es que está relajado; y si lo hace en altura de forma constante, puede suponer inseguridad, quizá por estrés debido a cambios en el entorno.

Por otra parte, el ronroneo puede tener diversos significados. Uno de ellos es contribuir a relajarse si, quizá, sienten dolor, están estresados o incómodos, pero es algo que no solo afecta beneficiosamente a los propios felinos. «Al investigar el fenómeno del ronroneo y cómo afecta a las personas que conviven con gatos se ha descubierto que este sonido tan peculiar disminuye el estrés y reduce la presión sanguínea, ayudando a rebajar el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares», afirma Celia Alesanco. Si el ronroneo es suave, puede ser síntoma de felicidad, al ser acariciados, pero también puede ser un modo de llamar la atención o reclamar alimento si tienen hambre.

Claro que los gatos también gruñen si algo no les gusta, de forma algo más discreta que los perros, incluso cacarean al cazar moscas, maúllan entre los de su misma especie y, ya como último aviso de que algo no les gusta, bufan. También aúllan si sufren dolor o se sienten en peligro. Otra forma de comunicarse son la posición de las orejas. En vertical y con movimientos suaves significa relajación, en horizontal quiere expresar temor, si además bufa es que se siente amenazado y puede atacar, mientras que con las orejas hacia delante y semblante serio es señal de alerta.

En la relación con el entorno doméstico el arenero es una parte fundamental para el bienestar de los gatos porque les proporciona un espacio para satisfacer sus necesidades fisiológicas de manera higiénica y segura. «Mantenerlo limpio y bien ubicado ayudará a promover su bienestar físico y emocional, previniendo problemas de salud y de comportamiento», asegura Sanicat. «Los cambios en el uso del arenero pueden ser señales de malestar, por lo que es importante descartar problemas de salud y considerar factores como la limpieza, tipo de arena y ubicación de la bandeja para garantizar el bienestar integral de la mascota», explica Celia Alesanco. El bienestar es la clave para que la salud y estado de ánimo del gato sean buenos.

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