El GAR herido en el atropello en Sevilla sale del hospital entre aplausos

El trágico suceso ocurrió hace mes y medio y hoy Peces ha podido regresar a casa. El vídeo lo ha compartido su compañero Alberto Perdiguero y en él no solo se ve su salida en camilla sino como sus compañeros le esperan para hacerle un emotivo homenaje. También el personal sanitario del hospital le despide entre aplausos y para ellos ha tenido unas palabras.

«Me habéis salvado la vida«, dice en el vídeo, »llegué aquí moribundo. Lo que más me ha sorprendido es el trato personal que habéis tenido conmigo. Uno llega aquí en la situación más traumática de su vida y vosotros con vuestro cariño y alegría habéis conseguido normalizado la situación mostrándome que esto es sólo un cambio de vida. Una vida diferente que no es ni peor ni mejor. Que sepáis que os llevaré siempre muy dentro. No os voy a olvidar en la vida».

La vida del miembro del Grupo de Acción Rápida (GAR) Alberto Peces ha cambiado desde el pasado mes de marzo cuando fue víctima del atropello mortal en el que perdieron la vida seis personas, dos de ellos compañeros, mientras realizaban un control antidroga y un camión les arrolló en la AP-4 en Sevilla. Alberto quedó en estado crítico. Ahora, mes y medio después del accidente, el video de su alta médica se ha hecho viral.

En él se recoge el momento en el que Alberto recibe el alta en el hospital Virgen del Rocío. Sus compañeros le esperan fuera de la habitación donde se había organizado un pasillo de honor. El joven agente, que ha quedado parapléjico debido a las graves lesiones sufridas, recibe una cariñosa despedida del personal médico acompañados de sus compañeros.

«Me habéis salvado la vida. Llegué aquí moribundo. Lo que más me ha sorprendido es el trato personal que habéis tenido conmigo. Uno llega aquí en la situación más traumática de su vida y vosotros con vuestro cariño y alegría habéis conseguido normalizado la situación, mostrándome que esto es sólo un cambio de vida, una vida diferente que no es ni peor ni mejor. Que sepáis que os llevaré siempre muy dentro. NO os voy a olvidar en la vida».