La Fiscalía rebaja a 22 años la pena para el ideólogo de la trama de empresas ficticias

«La figura de alcalde de Zarratón se fusionó con la de arquitecto», dice el fiscal

«En el caso del señor Villaverde existe una absoluta fusión entre la persona del alcalde y el arquitecto». Así resumió el Ministerio Fiscal la implicación de José María Jesús Villaverde (exalcalde de Zarratón) en el caso y al que le imputa un delito de negociaciones prohibidas a funcionarios y un delito de cohecho (mantiene para él la petición de pena de 1 año y 6 meses de cárcel). En su informe de conclusiones, el fiscal apuntó que en el municipio riojalteño «era notorio que el alcalde hacía muchas obras, algo que es delicado ya que los intereses se entremezclan».

La fiscalía explicó que pese a que intentara «mantener las apariencias y no intervenir en los procesos nucleares de esa toma de decisiones» nada quedaba fuera de su alcance, hasta el punto de que, defendió, «las apariencias se descuidaron por la mezcla de intereses particulares que no podía separar».

Esa confusión, defendió el fiscal, se materializó «en su intervención en la gestación de la operación de los terrenos de Zarratón. Interviene y la conoce», sostuvo antes de apuntar que ya en el 2004 hizo una referencia en el Pleno que viene a demostrar que «sabía lo que se estaba produciendo».

Así, ese delito de negociaciones prohibidas por funcionarios, defendió la fiscalía, se terminó de concretar cuando «personalmente» firmó un convenio urbanístico con una de las empresas de la trama (Pirineo 2010, SL) en el que a cambio de realizar la reforma de la plaza del pueblo recalificaría unos terrenos propiedad de dicha firma. «El alcalde sabía que iba a ser contratado como arquitecto por estas empresas».

Además, vinculado al delito de negociación prohibida, la fiscalía defendió que cometió el de cohecho al aceptar invitaciones por parte de la trama a diferentes hoteles en Biarritz y Salou y un cheque de 34.558 euros.