La financiación total del Bachillerato privado tendría un coste de más de 2 millones al año

A comienzo de curso, Alberto Galiana, consejero de Educación y Empleo, reveló su intención de caminar «gradualmente hacia el concierto del Bachillerato». El primer paso dado este año ha sido la convocatoria de ayudas de 800 euros por curso a quienes lo estudien en San Agustín y Santa Teresa de Calahorra, Menesiano de Santo Domingo de la Calzada, y Alcaste, Agustinas, Maristas y Marianistas, en Logroño. Según el Plan estratégico de la consejería, esta ayuda de 80 euros mensuales –con un presupuesto total de 600.000 euros– se duplicaría el siguiente curso y alcanzaría los 240 euros en el 2026/27.

Avanzar hacia la financiación completa del Bachillerato, como apuntaba Galiana, tendría un coste algo superior a los 2 millones de euros por curso. Esto, al menos, se traduce del importe que las familias abonan a los centros privados mes a mes por estos estudios. Los más baratos están en Calahorra, con 250 y 285 euros de cuota mensual, respectivamente, del San Agustín y el Santa Teresa. También por debajo de la barrera de los trescientos se encuentra Menesianos, de Santo Domingo (295 euros), mientras que los centros de Logroño la superan:Maristas (325), Marianistas (330) y Agustinas (345). La cuenta total, estimando importes y alumnado, asciende a 2.046.450 euros por curso, sin tener en cuenta Alcaste-Las Fuentes, que no ha dado a conocer las cuotas que cobra a sus familias y que elevaría algo más ese montante (2,3 millones en caso de seguir la tendencia de la capital).

La ayuda recientemente recuperada por el Gobierno, conocida popularmente como 'cheque Bachillerato', fue eliminada por el Ejecutivo socialista en el año 2020, aunque la normativa no desapareció, sino que dejaron de realizarse convocatorias. Esta situación, sin embargo, apenas afectó al número de estudiantes de los colegios privados –incluyendo Jesuitas–, que eran el 25,5% del total en 2019 (907 alumnos) y son el 23,3% en el actual (915).

El Gobierno riojano puede tomar en un futuro el camino de la financiación total del Bachillerato por medio de subvenciones a las familias, como se está empezando a hacer, pero el concierto, que dejó atisbar el consejero, implicaría otra posible vía. En este caso, el ejemplo es el de Jesuitas, el único centro de titularidad privada que cuenta con un Bachillerato concertado desde 2008, después de un litigio con el Gobierno presidido por Pedro Sanz en el que la justicia falló a favor del colegio.

Este año, Jesuitas ha recibido una partida de 739.382 euros por el concierto de sus siete unidades (clases) de Bachillerato. Casi el 80% de ese importe se destina a salarios, mientras que el resto responde a otros gastos. Esto se deduce de los presupuestos de La Rioja para 2024 e invita a realizar una traslación sobre lo que supondría concertar el Bachillerato que actualmente es privado. A 105.629 euros por unidad, las 34 clases de los siete centros restantes elevarían la partida de los conciertos en 3,6 millones de euros. Más caro, a priori, que la opción de la subvención total, aunque en ese caso entrarían en juego otros factores como el posible encarecimiento, en paralelo a las ayudas, de las cuotas de los centros, como han denunciado algunas voces de la comunidad educativa.