«España no puede seguir soportando los cambios tan continuos que se producen en Educación»

– ¿Cuáles son los principales retos y desafíos que afronta el sistema educativo en la actualidad?

– Son varias; y empiezan por las que afectan al profesorado. En más de una ocasión, José Luis Rodríguez Zapatero y ahora el actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciaron que esta era la legislatura del profesorado, pero no se ha producido ningún avance para actualizar o modernizar los perfiles que requieren los docentes. Respecto al sistema educativo, arrancamos año tras año con las mismas polémicas. En esta profesión se vierten una serie de afirmaciones relativas al sueldo o a los horarios que lejos de ayudar al trabajo, arrojan más incertidumbre. Hay muchos matices y muchas medias verdades, porque se arrojan mensajes que nada tienen que ver con la realidad. No entendemos por qué según empieza el curso se pone en el foco todo lo asociado a cuestiones profesionales ni cómo la educación se ha convertido en un elemento de confrontación política e ideológica que lejos de ir en la senda de asumir consensos que doten al sistema de la necesaria perdurabilidad normativa, arrojan incertidumbre e inestabilidad.

– ¿Cómo se puede preservar la educación de este ambiente?

– La única forma de combatir la incertidumbre es con actuaciones claras, decididas, y sobre todo, desde el consenso. España no puede seguir soportando los cambios normativos tan continuos que se producen en Educación, donde en los últimos 25 años no ha durado ni una sola ley los diez años preceptivos que, según los expertos, son necesarios para sacar conclusiones. Así es muy difícil avanzar.

– ¿Qué papel desempeñan los docentes con todos estos desafíos?

– El sistema educativo, a pesar de tantos vaivenes, sigue funcionando gracias a la profesionalidad de los compañeros que, día a día, hacen frente a la cada vez más enorme diversidad en las aulas y a ese papel interesado que los políticos hacen de los centros. Hay muchas cuestiones de índole social que requieren de la implicación de diferentes administraciones y de una mejor coordinación estatal, autonómica y municipal.

– La escasez de profesionales no es una problemática exclusiva de La Rioja. ¿Cuál es el problema que hay de fondo, que subyace detrás de esta carencia?

– La escasez de profesionales es un problema endémico no solo de España, sino del resto de países de la Unión Europea. En nuestro caso, estamos excluidos de una carrera profesional, por lo que hace falta que esta sea atractiva y que dé respuesta a las realidades que tenemos hoy en día en las aulas.

– En La Rioja, a pesar de que se están empezando a dar pasos para mejorar los procedimientos que afectan a los docentes con la modificación de la orden de interinos y del sistema de sustituciones, no se ha abordado aún la Oferta de Empleo Público y hay convocatorias extraordinarias sin resolver. ¿Sucede lo mismo a nivel nacional?

– El ámbito educativo necesita estabilidad y la mejor manera de hacerlo es con amplias convocatorias de empleo público que permitan acceder a una plaza. Existen diferencias entre comunidades relativas a la regulación del profesorado interino, las condiciones sociolaborales o los resultados académicos. Poniendo sobre la mesa los indicadores, entendemos que el ministerio, en coordinación con las comunidades, debe de sentar las bases para alcanzar, si no un pacto educativo, un acuerdo que dé estabilidad, porque con cada cambio de gobierno hay un cambio de ley. Hace falta vertebrar el sistema educativo para acabar con esa brecha autonómica, que nuestros responsables políticos aparten esas diferencias y hagan de la educación una verdadera prioridad. Todo empieza por alcanzar consensos, aunque sean mínimos, que alejen la incertidumbre y doten de estabilidad al sistema educativo.