El efecto COVID en las pensiones

La pandemia del coronavirus se cebó con las personas mayores y prueba de ello es la evolución de las pensiones de jubilación y de viudedad. Según los datos disponibles hasta julio, se trata de la primera vez en dieciséis años que la cifra de prestaciones desciende durante los siete primeros meses de un ejercicio. En concreto, este año lo hicieron el 0,3%, cuando en el mismo periodo del 2019 crecieron a un ritmo del 0,6%.

La caída de prestaciones fue especialmente intensa durante los meses más duros de la pandemia coincidiendo con el confinamiento. Entre marzo y mayo, La Rioja perdió 388 pensiones de jubilación y de viudedad. En la serie histórica que facilita la Seguridad Social no hay un precedente similar de tal calibre. La declaración del estado de alarma se produjo a mediados de marzo y entre ese mes y el siguiente se perdieron 51 prestaciones. El grueso, sin embargo, se concentró entre abril y mayo, cuando se registraron 337 bajas.

En términos absolutos, al cierre de julio La Rioja tenía registradas 47.255 pensiones de jubilación y 15.996 de viudedad. Estas últimas vuelven a niveles del 2012 (15.992).