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Los alumnos de La Rioja podrán superar y lograr el título de Bachillerato independientemente del número de suspensos con que cierren el curso. Dos serán los criterios para ello, que la media aritmética de los dos años de Bachillerato sea, como mínimo, de un 5, ... y que el equipo docente compruebe que no ha habido un abandono manifiesto de alguna de las materias. Ese es, en esencia, el contenido de la Resolución que la Consejería de Educación ha publicado en el Boletín Oficial de La Rioja de este viernes y en la que, en base a la pandemia y sólo para el curso que está en vigor, vuelve a dejar en manos de los equipos docentes la decisión última de que un alumno con varios suspensos repita o no curso.
Dos son los factores que, según la resolución, deberán tener en cuenta los equipos docentes. Por un lado, «las dificultades sobrevenidas que hayan podido tener los alumnos y alumnas con motivo de las situaciones derivadas de la pandemia por Covid-19«; por otro que, tras el análisis de la evolución del estudiante en cuestión, concluyan que «ha alcanzado los objetivos de la etapa y ha adquirido las competencias correspondientes».
En los tres niveles educativos (Primaria, Segundaria y Bachillerato), la resolución de la Consejería invita a los equipos docentes a «orientar las actividades educativas para que los aprendizajes más relevantes e imprescindibles y la capacidad para aprender por sí mismos permitan a los alumnos y alumnas la continuidad y el progreso en el proceso de enseñanza-aprendizaje» para, a continuación, introducir los matices en la evaluación y titulación.
En el caso de Secundaria, mantiene el criterio general existente hasta ahora. Así, para pasar de curso sigue el alumno no podrá suspender más dos materias como máximo (excepcionalmente tres si el equipo docente considera que la naturaleza de las mismas no le impide seguir con éxito el curso siguiente o para paliar los efectos de la pandemia. Lo mismo sucede para lograr el título de Secundaria: se aplica lo establecido en la normativa vigente que permite esa titulación con dos suspensos como máximo siempre y cuando no fuera, simultáneamente, Lengua Castellana y Literatura, y Matemáticas). En todo caso pero los equipos docentes podrán decidir, que un alumno está en condiciones de lograr el título si «ha alcanzado los objetivos de la etapa y ha adquirido las competencias correspondientes».
Es en Bachillerato donde se registra la principal novedad que introduce la resolución. Más allá de habilitar al equipo docente para pasar de curso a un alumno con más de dos suspensos, Educación dice expresamente que «no quedará supeditado al número de materias sin superar», deja la decisión en manos del equipo docente e incluye un requisito adicional: «la media aritmética de las calificaciones numéricas obtenidas en cada una de las materias cursadas en el Bachillerato para el cálculo de la calificación final de la etapa, deberá ser igual o superior a cinco puntos». Esta coletilla limita el aprobado general que reguló la Consejería para cerrar el curso pasado después de que las clases se suspendieran en marzo.
Además, la resolución también elimina las pruebas de diagnóstico que se venían realizando a los alumnos de 6º de Primaria y de 4º de ESO y que ya el curso pasado, con ocasión de la pandemia, fueron anuladas.
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