Hay motivos para la inquietud en la economía riojana. Existe cierta sensación de parálisis y los últimos datos que se están conociendo confirman esta realidad de que el crecimiento es inferior al esperado. Así lo asevera el último informe elaborado por CaixaBank Research, cuyas previsiones ... apuntan a un incremento del Producto Interior Bruto (PIB) regional –la riqueza de nuestra comunidad autónoma, al fin y al cabo– del 1,5%, casi medio punto por debajo de la media de España (1,9%). Sólo hay tres territorios con perspectivas inferiores:Extremadura (1,2%), Asturias (1,3%) y Cantabria (1,4%).
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Este dato del 1,5% coincide con el ofrecido el pasado viernes en la presentación de la revista 'Economía Riojana' que elaboran el Colegio de Economistas y la entidad Ibercaja. Y como en esa publicación, también en el documento de CaixaBank, realizado a partir de datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) y del comercio exterior con los que analiza todas las comunidades, se apunta a la ralentización del tejido industrial como uno de los obstáculos para el crecimiento. «El Índice de Producción Industrial está registrando cifras muy adversas. Tras anotar uno de los mayores retrocesos del país en 2023 –del -6,4% frente al -1,4% nacional–, en el arranque de 2024 prolonga su deterioro, con una caída en los dos primeros meses del 2,8% internanual, que contrasta con el avance del 4% en España», detalla el documento.
9.502 millones de euros
es la cifra a la que asciende el Producto Interior Bruto (PIB) riojano, que supone el 0,7% del español.
29.579 euros
es el PIB per cápita en La Rioja, el séptimo más alto de España y por encima de la media nacional (28.162).
Este lento despegue del sector industrial «contrasta» con el buen tono de las exportaciones, sostienen en CaixaBank Research. De hecho, crecieron el año pasado un 9,5% –cayeron el 1,4% en España–, «apoyadas en las ventas de semimanufacturas, sobre todo productos químicos, y algunos alimentos, como preparados alimenticios», mientras que las ventas en el exterior de carne y vino sufrieron un fuerte deterioro.
El «bajo grado» de ejecución de los Fondos Next –del 38,6% en La Rioja, la segunda comunidad con peor porcentaje después de Cataluña (33,1%) y lejos del 56% de media nacional– permite un margen de mejora «amplio, por lo que la aceleración en su implementación podría impulsar la inversión y dinamizar el tejido empresarial». Y dentro del horizonte de nubarrones aparecen el «potente sector primario y agroalimentario, que se beneficiaría de una meteorología menos adversa».
El PIB regional asciende a 9.502 millones de euros, el 0,7% de la riqueza nacional, y La Rioja es la comunidad con menor peso en el total nacional. Sin embargo, el PIB per cápita asciende a 29.579 euros, el séptimo en el ranking nacional –le superan los grandes 'trasatlánticos' económicos Madrid (38.435) y Cataluña (32.550), los vecinos País Vasco (35.832) y Navarra (33.798) así como Aragón (31.051) e Islas Baleares (29.603)– y que supera en un 5% el promedio español, que se sitúa en un PIB 'individual' de 28.162 euros.
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Con la industria al ralentí, las actividades vinculadas a los servicios también llevan una evolución «más modesta que en el resto del país», según CaixaBank. Aunque las ventas del comercio minorista se recuperan, en cuanto a volumen, tras el fuerte retroceso de 2022 debido a las tensiones inflacionistas, ese repunte es parcial: crecimiento del 1,7% en 2023 –del 2,9% en España– y del 1,5% en el arranque de 2024 –3,2% a nivel nacional–.
Por último, se analiza el mercado laboral, «que está siendo algo menos dinámico». Porque aunque en 2023 registró un aumento del 1,4% en el número de afiliados –2,7% de la media española–, se aceleraba en los primeros compases de 2024 y crecía en marzo un 1,9% interanual –2,6% en España–, superando en más de un seis por ciento los del del mismo mes de 2019, el año previo a la pandemia.
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¿Qué sector de actividad manda en la economía riojana? La respuesta a esta pregunta exige matizaciones. Es evidente que el primario (agricultura y ganadería) tiene una gran relevancia, aunque atendiendo al porcentaje sobre el Valor Agregado Bruto –magnitud económica que computa los bienes y servicios producidos sin los impuestos indirectos y descontando los insumos– es predominante el sector servicios que aglutina a las empresas de comercio, transporte, hostelería, ocio...
Sin embargo, la industria es la que acapara casi la mitad de la estructura productiva en La Rioja, según el estudio de CaixaBank Research, en concreto el 47,3%. Eso sí, se incluye la industria extractiva (4,8%), la manufacturera (21,2%) y los servicios ligados a esta actividad (21,3%) –en los dos últimos epígrafes ha habido cierta caída con respecto al año anterior–. En la comparativa con España, llama la atención la importancia del sector agrario riojano, con un 5,2% del VAB, el doble que el dato nacional.
Durante el pasado año, el Producto Interior Bruto (PIB) creció finalmente en nuestra región el 1,9% –estaba previsto el 1,8%– pero en España se incrementó se fue al 2,5% cuando el pronóstico inicial era del 2%.
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