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No es la primera vez que un derrumbe rompe la tranquilidad de La Rioja, aunque ha habido pocos de tanta magnitud. En muchos de ellos la suerte fue el factor que ayudó a que no hubiera heridos y se quedaron sólo en un susto o ... a lo sumo en un desalojo de la vivienda.
La calle Arrabal de Calahorra, que en ese momento se encontraba en obras, asistió al derrumbe total de una vivienda que estaba deshabitada. Con motivo del incidente hubo que desalojar y realojar, después, al vecino de la casa anexa.
Ocurrió hace exactamente un año. El 25 de julio del 2022, dos personas resultaron heridas en un derrumbe de un andamio en la calle María Teresa Gil de Gárate. La caída de la estructura en plena vía, a escasos metros de la Gran Vía y en una zona plagada de bares con terraza, pudo acabar en tragedia. Sin embargo, el azar hizo que el aparatoso suceso se saldara con dos heridos leves: el jefe de la obra, que se encontraba subido en la estructura, y el operario encargado de controlar el paso de los peatones.
Un nuevo derrumbe interno en el edificio número 72 de la calle Pinar de Santo Domingo de la Calzada provocó una gran polvareda, además de un gran susto. Por suerte no hubo que lamentar heridos.
Los vecinos de Pérez Galdós 48 se llevaron un susto cuando las obras en un patio de la comunidad terminaron con el suelo del mismo hundido sobre un entresuelo al que se accede por el garaje de dicha calle. Por suerte nadie resultó herido y solo una persona terminó con un rasguño pero no necesitó traslado hospitalario.
Parte de una vivienda se derrumbó en la calle Ronda de Lérida de Alfaro. Se trataba de un 'cuarto' (lugares de reunión de grupos de amigos) que al parecer se derrumbó a causa de las lluvias de los días previos. Según explicó la Policía Local de Alfaro, no hubo que lamentar heridos ya que el suceso ocurrió de madrugada, alrededor de las cuatro .
Un derrumbe en un edificio de la calle Valcuerna de Logroño obligó a desalojar a 13 familias. El suceso se debió a la rotura de una viga. Los residentes tardaron varios días en volver a sus viviendas.
La plaza-mirador de Cornago se desplomó al vacío. Filtraciones de agua pudieron provocar la destrucción del muro, por lo que unos 200 metros cuadrados del pórtico de la iglesia desaparecieron tras caer desde una altura de 10 metros.
Los vecinos del número 35 de la calle Barriocepo fueron desalojados, en total 17 personas, después de que cediera la techumbre de la cocina del primero izquierda. La única víctima fue una mujer de 81 años que fue trasladada por los recursos sanitarios al Hospital San Pedro.
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