Más demanda que oferta de vivienda en el medio rural

La despoblación rural es un problema sobre el que se han vertido muchas ideas, también muchos titulares y ya muchos fondos públicos, sin que se haya corregido nada de forma sustancial. Y es que los principales atractivos para asentar población, aunque ya muchos alcaldes se conforman no con ganar sino con retener los pocos habitantes que quedan en sus municipios, son más difíciles de arreglar que con un publicitario brindis al sol: se necesita trabajo y vivienda. El trabajo no está tan al alcance de los políticos, pero la vivienda sí parece más viable.

Esta misma semana el Gobierno de La Rioja anunciaba el inminente plan Revive para incentivar la adquisición de viviendas en municipios de menos de 5.000 habitantes con ayudas de un máximo de 40.000 euros. La medida, que así expuesta supone un gran aliento hacia el mundo rural, y que aún queda por detallar, esconde una realidad que el plan Revive tendrá que superar, y es la falta de vivienda disponible en los pueblos para poder comprar, porque el alquiler ya es más escaso aún.

Lo saben bien en Torrecilla en Cameros, cuyo Ayuntamiento recientemente ha puesto en marcha una bolsa municipal de vivienda que ha recibido mucha más demanda que oferta, a la que el alcalde, Sergio Martínez Astola, reconoce como «testimonial». «Somos un municipio con problemas notables para los que quieren venir a vivir. Estamos muy enfocados al turismo y hay mucha segunda residencia de la que la gente no se quiere desprender y en las que hay a la venta el precio es inasumible», explica el alcalde de Torrecilla. Ese fue el motivo para poner en marcha este recurso municipal, que se encarga de poner en contacto a quien demanda y a quien oferta vivienda, sin intervenir más.

Cabe recordar que el IRVI ha licitado ya la redacción del proyecto de construcción de 24 viviendas energéticamente eficientes para alquiler en Torrecilla, lo que a buen seguro aliviará en parte la situación en la cabecera del Camero Nuevo. «Hay poca venta y poco alquiler. Los que hay están todos ocupados», especifica Martínez Astola, que advierte que la bolsa de vivienda tiene vocación de continuidad y espera que más propietarios se animen a vender y alquilar porque hace al menos más de una década que no se construye una promoción de viviendas en la localidad, si bien la solicitud de permisos para construir individualmente es fluida.

En Villoslada de Cameros rehabilitaron el antiguo cuartel de la Guardia Civil y las viviendas del secretario municipal y del médico cuando quedaron inutilizadas para ofrecerlas en alquiler. Son una docena que se arriendan por no más de 380 euros mensuales. Y a esto se une una promoción de carácter privado que también tiene parte en alquiler. «Hay demanda por parte de gente del pueblo o de la zona, como personas que vienen a trabajar, sobre todo, en el monte», expone Julio Elías, alcalde de Villoslada. Las viviendas municipales se alquilan por un periodo de cinco años prorrogables por otros cinco. «Siempre hay más demanda que pisos disponibles. El anuncio del plan Revive me parece muy bien ya no para atraer población sino para retener la que nos queda», advierte Julio Elías.

La Rioja cuenta con 165 municipios con menos de 5.000 habitantes, que es donde se pueden obtener las ayudas del plan Revive si se tiene menos de 45 años, un sueldo inferior a 3.600 euros mensuales y el importe de la adquisición, incluyendo la rehabilitación, no supera los 180.000 euros. En pueblos de menos de 500 habitantes, como Torrecilla, Villoslada o Clavijo, es posible obtener una ayuda del 40% del precio de la vivienda adquirida, hasta un máximo de 40.000 euros. En municipios de entre 501 y 2.000 vecinos, como Arrúbal y Agoncillo, la ayuda es del 30%, hasta 30.000 euros. Y en las localidades de entre 2.001 y 5.000 empadronados, como Albelda, Alberite, Fuenmayor o Navarrete, la subvención es del 20%, hasta 20.000 euros.

Cabe especificar que tanto las aldeas como las entidades locales menores se incluyen en los municipios de los que dependen, es decir, Islallana, al pertenecer a Nalda (1.329 habitantes), se encuadrara en las ayudas de un máximo de 30.000 euros y las aldeas de Ezcaray estarían en el tramo cuyas ayudas no superarían los 20.000 euros, al contar el Ayuntamiento con más de 2.000 habitantes. Sucederá lo mismo con Cervera del Río Alhama, dará igual si se adquiere vivienda en cualquiera de sus núcleos de población (Cabretón, Rincón de Olivedo, Valdegutur, Valverde y Ventas del Baño), como todas dependen de la cabecera, que suman 2.262 habitantes, en este caso las ayudas serán del 20%.

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