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Un manto protector en la vanguardia de la lucha contra la pandemia. Como ocurrió en las residencias de mayores, a punto de cumplir dos meses 'limpias' de COVID-19, las bondades de la vacunación contra el SARS-CoV-2 resultan ya indudables también entre ... los trabajadores de los centros sanitarios riojanos, donde se ha apreciado en el último trimestre un desplome de la incidencia hasta lograr casi la práctica erradicación de la enfermedad entre un colectivo que acumula, desde el inicio de la pesadilla hace ya trece meses, 868 infectados, el 16,85% del total de las plantillas.
La estadística de contagios comenzó a caer en picado a las pocas semanas de la inoculación de las primeras dosis vacunales, cuando La Rioja se encontraba aún en riesgo extremo por la virulencia de la pandemia en febrero. Así, los 182 casos computados en enero pasado, a la vuelta del periodo navideño, quedaron reducidos a 11 en el siguiente mes, a un único positivo en marzo y a 4 (uno de ellos no vacunado) en esta primera quincena de abril.
«La incidencia de la vacunación es evidente, porque en el ámbito sanitario la curva se desplomó a partir de febrero, cuando se estaba en pleno proceso de administración de la segunda dosis», destaca Carmen Arcéiz, jefa del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales del SERIS, que señala que «la confianza es que la vacuna nos proteja en esta cuarta ola». Para ello, se basa en la altísima tasa de inmunizados lograda. «El 95% de los trabajadores de los centros sanitarios se ha vacunado, lo cual es un éxito, porque hablamos de profesionales sanitarios, pero también del resto de personal del sistema público de salud: del SERIS, de Fundación Rioja Salud y de Fundación Hospital de Calahorra, incluido el personal de las contratas externas, casi un millar de personas, -limpieza, mantenimiento, seguridad...- y los estudiantes», detalla, para añadir que, «de hecho, ese porcentaje sigue subiendo, porque se están administrando las dosis a aquellas personas que en su día no pudieron, por ejemplo, los que pasaron el COVID y deben esperar seis meses».
Carmen Arcéiz | Jefa de Prevención de Riesgos Laborales del SERIS
La nueva situación abre un escenario de esperanza y tranquilidad para un colectivo que no ha escapado de las garras del virus en ninguna de las oleadas: 341 contagiados en la brutal primera ola -220 en marzo, 121 en abril y ninguno en mayo y junio-, 281 en la segunda -10 en julio, 21 en agosto, 57 en septiembre, 115 en octubre y parte de los 65 de noviembre- y 246 en la tercera -los restantes de noviembre, 61 en diciembre, 182 en enero, 11 en febrero, 1 en marzo y 4 en abril-. En el San Pedro, curiosamente, la tercera ola, 190 casos, superó a las anteriores, 168 y 158 positivos, respectivamente.
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La estadística oficial del SERIS permite también detallar la incidencia por colectivos profesionales, con el mayor número de contagios en Enfermería, con 301 y el 18% de la plantilla afectada, lo que supone el 34,68% de los 868 afectados totales. A continuación los médicos, 194, el 15% de ellos, y el 22,35% del total; auxiliares (TCAES), con 179 positivos, el 21% de la plantilla y el 20,62% de la incidencia total; el 14% de los celadores, 53 casos, el 6,11% del global; el 15% de otros profesionales sanitarios, 51 contagios (5,87%); y el 14% del personal no sanitario, 90 positivos (10,37%).
194 médicos, el 15% de los profesionales, han padecido COVID-19 desde el inicio de la pandemia.
301 enfermeras, el 18% de la plantilla total, y 178 auxiliares (20,62%) han dado positivo.
Con una incidencia similar por empresas, los 868 contagios suponen el 16,85% de los 5.149 trabajadores totales: en el SERIS, 752 casos entre las 4.350 personas que componen su plantilla (17,28%); en Fundación Rioja Salud, 43 casos entre sus 242 trabajadores (17,76%); y en Fundación Hospital de Calahorra, 73 positivos entre las 557 personas que completan su personal (13,10%).
Respecto a los 752 contagios entre el personal del SERIS, 518 eran trabajadores del San Pedro -entre otros, 69 médicos, 172 enfermeras, 126 auxiliares y 46 celadores-, 13 del Hospital General de La Rioja, 10 del CARPA, 29 del Centro de Salud Mental de Albelda y 182 de Atención Primaria -86 médicos, 70 enfermeras, 8 auxiliares...- que, de hecho, supera en incidencia a la Hospitalaria, 18,46% frente a 16,80%.
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