Salud investiga un posible brote por coronavirus en Medrano tras el positivo de un joven natural de la localidad

Se trata del protocolo que Salud activa en cada ocasión que se detecta un nuevo caso de positivo por COVID 19 en la comunidad y que también ha puesto en marcha en esta ocasión. El equipo de rastreadores encargado de identificar a las personas que han estado en contacto con un contagiado es el que entra en contacto directamente con cada uno de los posibles sospechosos. Así, a lo largo de toda la tarde de hoy, hasta 70 vecinos del municipio de Medrano que han admitido haber coincidido con el joven contagiado en los últimos días han sido citados para someterse a la prueba PCR y confirmar si han sido o no contagiados. En función del resultado que arrojen las pruebas, dichos rastreadores serían los encargados de continuar en los próximos días el seguimiento de todos los contactos con el objetivo de completar el trazado de la cadena de contagios y controlar así la aparición de un posible nuevo brote.

El pasado viernes, último día en el que Salud ofreció datos oficiales, había tres brotes por COVID 19 activos en La Rioja. Precisamente esa jornada, la comunidad notificaba al Ministerio de Sanidad un nuevo brote en San Asensio detallando que afectaba a seis personas.

La situación epidemiológica de la región continuaba hasta entonces evolucionando de manera positiva ya que se pasaba de seis a tres brotes activos después de que cuatro brotes detectados en las semanas pasadas pasaran a considerarse no activos tras no detectarse nuevos casos asociados desde su notificación, y a pesar de que se informaba del nuevo foco en San Asensio que según la información aportada por Salud, afectaba a seis personas con un vínculo epidemiológico originado en el ámbito del ocio. Todas ellas se encontraban en ese momento asintomáticas o con síntomas leves de la enfermedad. El seguimiento de los casos confirmados de la enfermedad y las pruebas realizadas a sus contactos estrechos estaban han facilitado, según fuentes del Gobierno regional, la interrupción de la cadena de transmisión y controlado la evolución de los brotes.

Hasta este pasado fin de semana, todos los brotes de COVID-19 detectados en La Rioja estaban siendo de pequeña magnitud y controlados por los equipos de seguimiento de contactos. Ninguno de los casos asociados a los brotes había requerido hospitalización, ya que se estaba tratando de casos asintomáticos o con clínica leve.

Además del de San Asensio, los brotes activos en La Rioja a fecha del pasado viernes eran el de Nieva de Cameros, notificado el 2 de agosto y con cuatro casos confirmados y el de Alesanco, que se notificó el 5 de agosto y que tiene seis casos confirmados.

Según los datos de las 24 horas anteriores, el viernes se informaba de la detección de 13 nuevos positivos por COVID 19 en la región, mientras cifraba en cinco el total de pacientes ingresados en los hospitales de La Rioja en dicha fecha.