Salud hará pruebas a todo el personal de las residencias para tratar de frenar los casos

Pero en este segundo embate del virus se había conseguido mantener las residencias relativamente bajo control. Tras llegar al centenar de casos activos en septiembre, la residencias habían ido poco a poco bajando en incidencia hasta estar por debajo de 30 casos hace diez días.

Pero ahora las cosas han empeorado súbitamente. En solo dos días los casos activos han pasado de 40 a 67, con ya seis centros de mayores (de los 32 que hay en La Rioja) con contagios comprobados.

Así las cosas, y con un entorno cada vez más preocupante fuera de las residencias, las autoridades sanitarias han decidido intervenir para intentar mantener la relativa burbuja que hasta el momento han sido las residencias en estos momentos.

Y teniendo en cuenta que los internos se encuentran prácticamente aislados, la intervención se va a centrar en la parte del sistema que más contacto tiene con el exterior. Así, Salud empezará en los próximos días una campaña urgente de cribados por la que pasarán entre 2.000 y 2.500 trabajadores de las residencias que dependen de Servicios Sociales. No solo los 32 centros de mayores, sino también los centros de atención a personas discapacitadas.

No es la primera vez que el Gobierno de La Rioja decide hacer pasar por un cribado masivo a todo el personal de las residencias de ancianos. El primero fue en septiembre, y por él pasaron 1.986 trabajadores de las residencias de la tercera edad.

En aquella ocasión se realizaron PCR, pero ahora Salud aprovechará las nuevas pruebas de antígenos que ya estrenó a gran escala en el cribado de Logroño, y que permiten obtener resultados muy rápidos y con mucha fiabilidad. Y en esta circunstancia, la rapidez es importante: conviene sacar del circuito de las residencias cuanto antes a los trabajadores que, inadvertidamente, puedan estar siendo portadores del virus aún siendo asintomáticos, y que pueden provocar nuevos brotes en las residencias.

Salud no ha notificado estos días en qué centros de tercera edad o dependientes de servicios sociales se han producido los nuevos brotes.