«Tuvimos que reinventarnos para ver cómo trabajar»

En su caso, la tarea era especialmente complicada, porque prima «el contacto físico, el acercamiento». Al final, las nueve profesoras de Audición y Lenguaje formaron un gran equipo y pusieron en marcha un blog. «Tuvimos más de 2.400 visitas de gente de todo el mundo, no sólo de España», comenta.

En junio, se incorporó a la atención directa, pero con la mitad de la clase, y solo por una semana. «El problema era que los niños no llevan mascarilla y nosotras sí y ellos no te pueden ver la cara y la efusividad y el acercamiento y el cariño que transmites se pierde, además había que poner freno a los impulsos de los abrazos, de los besos y eso resta calidad humana», detalla.

Y llegó septiembre y «nuestros niños, que son especiales, en el verano es como si pasa un huracán y barre. Luego, poco a poco van otra vez cogiendo el ritmo, van recuperando, pero eso es general, no solo por la pandemia, la pandemia ha podido acentuar algunas cosas más, pero a nuestros niños, por lo general, no les he notado más retraídos», apunta.