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El puente le ha sentado mal a Logroño. La capital riojana ha empeorado sensiblemente sus indicadores en los últimos tres días, y aunque aún no está en los umbrales que marca Sanidad para confinar las ciudades de más de cien mil habitantes, se va acercando. ... Y la tendencia de la epidemia de COVID-19 en la mayor población de La Rioja no es nada buena.
Dos de los indicadores, en concreto, han aumentado muy sensiblemente entre el día 9 y el 13. Por una parte, el más famoso de todos: la incidencia acumulada de las dos últimas semanas, es decir, los casos por cien mil habitantes registrados durante los últimos 14 días. El viernes 9, la incidencia acumulada era de 269 casos por cien mil habitantes. Hoy, ya es de 345,4.
Es un muy mal dato, se mire por donde se mire. El umbral de confinamiento es 500, aún queda, pero ese 345 marca una incidencia acumulada ya altísimia, y la tendencia es muy preocupante. Por ejemplo, el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC) señala que una incidencia por encima de 60 ya es «alta», y exige restricciones más claras. Logroño ahora mismo multiplica ese límite por más de 5,7.
También ha empeorado mucho la situación en la UCI del San Pedro. El viernes tenía 18 de sus 52 camas ocupadas por pacientes COVID. Hoy son 22, y la Unidad de Medicina Intensiva del hospital riojano vuelve así a su máximo de esta segunda ola de la pandemia.
El umbral marcado por Salud es del 35% de las camas de la UCI ocupadas por pacientes con coronavirus. El viernes, el porcentaje era del 34,61%. Hoy es del 42,37%, ya dejando muy atrás el límite.
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Daniel Roldán
Y finalmente está el porcentaje de positividad de las pruebas, es decir, qué tanto por ciento de las PCR que se realizan es positivo. Un porcentaje alto significa que la transmisión está desbocada y probablemente sea comunitaria. El limite esta en el 10%.
Logroño lleva en el filo de ese 10% desde hace semanas. En algunos días baja al entorno del 8%, y en otras ocasiones supera el umbral máximo. El porcentaje era el viernes del 10,8%. Hoy, es del 9,96 %: 31 pruebas positivas de 311 realizadas.
Acercarse a esos umbrales es malo, pero aunque la ciudad no llegue a ellos, la situación actual ya es más que preocupante, con una tendencia al alza y unos datos sensiblemente por encima de los que las instituciones internacionales recomiendan para tomar medidas drásticas.
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