Las incidencias acumuladas y la ocupación de la UCI sitúan a La Rioja en riesgo alto

El nuevo semáforo del Ministerio incluye una serie de indicadores que determinan el nivel en que se encuentra cada comunidad autónoma distribuidos en dos bloques: incidencia de la enfermedad y capacidad asistencial. Para que se alcance un nivel de alerta, al menos dos parámetros del primer bloque (indicadores de transmisión) y uno del segundo (capacidad asistencial) deben estar en ese nivel.

Es lo que sucede con La Rioja, cuya incidencia acumulada (IA) a 14 días está claramente por encima del 150 que marca el nivel 2 (el pasado viernes estaba en 208,49) y lo mismo sucede con la IA a 7 días, que el viernes estaba en 116,28 y el nivel 2 precisa un mínimo de 75.

En el bloque de capacidad asistencial, La Rioja cumple con los niveles de menos riesgo en el caso de la ocupación de camas sanitarias en los hospitales, con el 3,83% sobre el total (bajo), pero no así en el de ocupación de camas UCI, con el 25,58% y, por tanto, en riesgo muy alto.

El sistema y la situación es revisable en función de la evolución de la pandemia y de los diferentes indicadores, pero por el momento la comunidad riojana queda enclavada en el nivel 3 de riesgo alto, junto con el País Vasco (ninguna región está en muy alto). Tampoco hay ninguna comunidad en nivel 0, pero sí varias en bajo (1), como son Galicia, Extremadura, Cantabria, Navarra, Comunidad Valenciana, Murcia, Baleares y Canarias. En riesgo medio (2), se sitúan Asturias, Aragón, Cataluña, Castilla y León, Madrid, Castilla-La Mancha y Andalucía.