Educación informa de 57 positivos en 37 colegios de La Rioja desde que empezó el curso

Así, ha desgranado que los casos corresponden a colegios de Logroño (32, 17 de Infantil y 15 de Primaria, ha especificado Uruñuela), Calahorra (11), Arnedo (6), Arnedillo y zona del CRA (3), Lardero (3), Alfaro (1) y Rincón de Soto (1), aunque no ha ofrecido el dato concreto de qué centros son los afectados por el COVID-19.

La etapa de mayor incidencia es la de educación infantil, ha dicho Uruñuela. Asimismo, ha agregado el consejero que son 11 las aulas confinadas de educación infantil de 3 a 6 años y seis las de centros de educación infantil de 0 a 3 años; mientras que ningún aula de Primaria se ha confinado por el protocolo establecido, que ha pasado a detallar el Inspector Médico, José Ignacio Aguado.

El consejero de Educación, por su parte, ha insistido en la voluntad de su departamento de garantizar la seguridad de los escolares riojanos. De ahí, que haya aplaudido la labor que están realizando los coordinadores COVID, cuyo comprometido trabajo ha logrado que La Rioja sea «la envidia de las comunidades vecinas», en cuanto a la incidencia del coronavirus en el ámbito escolar. Uruñuela ha atribuido también el mérito de los buenos resultados al cumplimiento de las medidas higiénicas y al buen funcionamiento de los grupos de convivencia estable o grupos burbuja. Sin embargo, ha reconocido que aún falta trasladar estos buenos hábitos dentro de los centros a cuando los niños salen del colegio. También ha rechazado que esté previsto el cierre de ningún colegio, más allá de las aulas confinadas sobre las que ha informado.

En cuanto a los reproches recibidos por parte de la oposición en las últimas fechas sobre la gestión de los positivos en Educación, Uruñuela no ha querido responder más allá de reclamar que «no es el momento de enredar sino de cooperar».

Por su parte, el Inspector Médico, José Ignacio Aguado ha señalado que cada ciclo formativo dispone de un protocolo diferente, dadas las distintas medidas de seguridad que se aplican. Así, cuando se detecta un caso positivo en Educación Infantil, donde la mascarilla ni la distancia social son obligatorias, todo el grupo queda aislado, y se procede a realizar una PCR en menos de 24 horas. El confinamiento del grupo ha de prolongarse durante diez días, si se realiza una segunda PCR de descarte, o durante catorce si no hay segunda PCR.

El Inspector Médico también ha comentado que la situación cambia en Primaria, donde sí hay obligación de mascarilla y mayores medidas de seguridad. En este nivel educativo, donde hay «cierto margen» según Aguado, se realiza una PCR a todos los alumnos del aula y se les envía a casa hasta obtener los resultados. En el caso de resultar negativos, vuelven con normalidad a clase; pero si se detectan tres o más positivos, se actúa como en el protocolo de Infantil.

El panorama cambia sustancialmente en el caso de Secundaria y demás ciclos. Al entenderse que hay mucha mayor complejidad a la hora de establecer contactos estrechos (más cambios de clases, optativas y demás incidencias), el protocolo dispone que se realizará un estudio y un seguimiento individual de los contactos estrechos de cada estudiante, según lo valore cada profesional médico.

Aguado ha insistido que los protocolos se activan teniendo en cuenta las 48 horas previas a mostrar síntomas o a partir de la realización de la PCR en el caso de los asintomáticos. «No se ponen en marcha antes porque el riesgo es mucho menor», ha detallado el Inspector Médico.