Prefiere que le llamen Tris. «Cuando me llaman Carlos por la calle a veces ni me vuelvo, porque ya casi nadie me conoce así». Y es que Carlos Sacristán (Logroño, 1967) hace mucho tiempo que pasó a ser Tris por sus dibujos y la particular ... manera que tiene de ver el mundo a través de sus ilustraciones. Por algo lleva desde el año 1998 contando cada día a los riojanos su forma de ver la actualidad desde su viñeta de Diario LA RIOJA.
– Trabaja desde casa, rodeado de pinturas y acuarelas. ¿Cómo ha cambiado su situación en estos días?
– Como la oficina la tengo en casa, tampoco ha cambiado mucho mi forma de trabajar. La única diferencia es que habitualmente solo estamos mi gato y yo y ahora tenemos la casa llena de gente. Ahora somos cuatro y el gato. Estamos como que nos han invadido.
– ¿Cual es su forma de aportar su grano de arena en este momento que nos ha tocado vivir?
– Yo valoro mucho lo que está haciendo la gente que tiene que estar trabajando estos días fuera de casa, ya sea en el sector de la alimentación como sanitarios o en el que sea. Yo, lo que puedo aportar lo hago cada día desde mi viñeta en el periódico, que no es mucho pero es lo que yo sé hacer.
– Y, echándole imaginación, ¿cómo cree que dibujaría este momento dentro de 20 años?
– Como un mal recuerdo que no se volvió a repetir. Un momento histórico como el que vivieron nuestros abuelos con las guerras, pero que a partir de ese momento no se dio más, y si se da, que ya nos pille preparados, no por sorpresa, como esta vez.
– Con tanto tiempo para pensar, ahora en casa, ¿tiene algún proyecto nuevo en la cabeza?
– Pues sí. En un mes, si la situación lo permite, verá la luz la segunda parte de mi juego la Baraja Mutante, con nuevos personajes y que será complementaria de la anterior, para que se puedan mezclar las cartas.
–¿Y es fácil tirar de humor y hacer su trabajo con la que está cayendo?
– Estoy cansado porque la situación ya es casi monotemática. Creo que llevo ya unos 26 chistes sobre coronavirus, seguidos mucho de ellos. Además, hacer un chiste sobre una enfermedad tan peligrosa y que está causando tanto dolor es difícil, hay que ir con pies de plomo. Y tengo ganas de cambiar de tema por dos razones, primero porque eso significará que se ha superado la pandemia y segundo, para poder cambiar de enfoques.
– ¿Qué es lo que más echa de menos estos días?
– Pues es que yo, cuando empezó el encierro, ya llevaba unos días sin poder salir de casa por problemas de salud anteriores, y ahora que empiezo a recuperarme es cuando empiezo a darme cuenta de que no podemos salir y de que hay que quedarse en casa, así que para mí toda la situación todavía se alarga un poco más. Pero aguantaremos lo que nos echen.