Secciones
Servicios
Destacamos
TERI SÁENZ
LOGROÑO.
Viernes, 14 de agosto 2020, 07:25
Las expectativas que manejaban a principios de verano los alojamientos turísticos de La Rioja se han confirmado. Para lo bueno y para lo malo. ... Ante uno de los fines de semana que otros años supone uno de los que más visitantes atrae a la comunidad, la perspectiva entre los empresarios que les dan cobijo es desigual. Como auguraban los propietarios de las casas rurales en un ejercicio condicionado por la pandemia y todas las restricciones y temores adjuntos, el balance es más que satisfactorio. «Desde junio la respuesta ha sido notable, y ahora estamos prácticamente al 100%», confirma José Joaquín Sanz, el presidente de la asociación Ascarioja, que aglutina a 84 establecimientos. Si al principio de la temporada, cuando el COVID-19 copaba los titulares y las medidas de seguridad se extremaron, fueron clientes riojanos quienes 'empujaron' las reservas, entrado el periodo estival han sido las regiones habituales –Cataluña, Valencia, País Vasco, Madrid...– las que han nutrido una ocupación que, además, ha tendido a alargar estancias que antes no superaban los 2/3 días de media. Para Sanz, además del atractivo del entorno donde se ubican las casas rurales y la posibilidad de disfrutarlas en grupos cerrados, los propios municipios han favorecido la mejora. «Los pueblos han dado todo de sí para que el turismo se haya decantado por La Rioja en una temporada compleja», opina.
Noticia Relacionada
Los campings tampoco expresan quejas. Las cautelas que verbalizaba Jon Salgado en los albores del verano se han disipado con, eso sí, una novedad. «La antelación en las reservas que era común otros años ahora ha tornado en peticiones de última hora, un poco en función de los cambios y noticias que iban apareciendo sobre brotes», indica el presidente de la asociación de campings de La Rioja, donde se han cubierto la totalidad de las plazas en las festividades más señaladas y el resto de las jornadas de un año «atípico» ha rondado una media superior al 90%. «La gente ha optado por lugares de naturaleza y tranquilidad», cree.
Las peores noticias llegan desde los hoteles en un periodo estival que el presidente de la asociación riojana del ramo integrada en la FER no duda en calificar de «catastrófico». «Las perspectivas, por desgracia, se han confirmado», lamenta advirtiendo de las consecuencias que ello acarrea no solo entre los empresarios y empleados del sector, sino para el entramado de restauración, ocio y cultura que gravita a su alrededor. La ocupación alcanzada hasta ahora y la que se augura de aquí a finales de mes es desoladora. Apenas el 35%, con el agravante de que no pocos hoteles, algunos de ellos referentes en los municipios donde se ubican, ni siquiera han abierto conscientes de la coyuntura. «Los esfuerzos de todos, nuestros en forma de múltiples ofertas y flexibilidad de anulaciones y también de la administración, han sido ímprobos, pero la coyuntura es crítica», asume en la esperanza de la campaña de promoción turística del Gobierno –«la mejor que podía hacerse en estas circunstancias»– reporte efectos a medio plazo y «se pueda remontar algo durante el otoño».
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Favoritos de los suscriptores
Destacados
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.