Calahorra levanta los controles, aunque intensifica la vigilancia dentro del casco urbano

El refuerzo de la vigilancia se llevará a cabo, de manera especial, «en las horas y situaciones en las que existen más posibilidades de que se infrinjan las normas», señaló la regidora para matizar a continuación que «en algún momento dado podrá haber algún tipo de control aleatorio en horas y días determinados y en lugares que consideren oportunos».

Continuarán, por otro lado, las medidas especiales adoptadas por el Ayuntamiento el pasado 14 de septiembre, como el cierre del mercadillo y de los parques infantiles, así como la obligatoriedad de la mascarilla por deportistas en zonas peatonales.

Estas directrices, según recalcó Garrido, «han dado resultado». «Y sumadas a las de estos siete días entendemos que van dar un mejor resultado todavía», añadió. De todos modos, la alcaldesa calagurritana pidió no bajar la guardia, porque aunque «la tendencia está siendo buena, no podemos olvidar que ayer –por el martes– hemos tenido 14 casos nuevos». «Nos queda trabajo por hacer», insistió Garrido al detallar que ayer los casos activos se redujeron hasta 88 y que la incidencia acumulada en los últimos 14 días es de unos 700 casos por 100.000 habitantes.

«Hemos hecho un importante esfuerzo colectivo que tenemos que mantener, porque si no lo mantenemos la autoridad sanitaria tendrá que volver a tomar medidas», advirtió la regidora.

De otro lado, la hostelería, que el martes salió a la calle como protesta, puede ya atender a clientes en el interior de sus locales. «El Ayuntamiento ha cumplido con creces con el sector hostelero», dijo Garrido al hilo de la concentración y enumerando a continuación las acciones realizadas para favorecer estos negocios. Entre ellas, la ampliación del espacio de terrazas o las citas musicales en zonas de hostelería.