¿Contrato mi viaje 'on line'?

Dejarse llevar por las 'gangas' que bombardean al consumidor de forma incesante es toda una tentación, pero no necesariamente conveniente. Hay estadísticas que reflejan que los españoles 'tiran' cada vez más de Internet para reservar sus escapadas. Lo recoge, por ejemplo, la plataforma de actividades 'Musement', que asegura en un estudio que el 86% ha contratado alguna vez 'on line' por la posibilidad que ofrece de adaptarlas a sus necesidades.

Que internet aporta más versatilidad es uno de los argumentos principales por los que se están incrementando a velocidad de vértigo las reservas de cariz turístico a través de canales 'on line'. Según Álvaro Granell, presidente de la Unión de Consumidores de La Rioja, «hay que tener en cuenta que nos permite conectarnos a cualquier hora desde cualquier sitio; no tiene un horario de cierre y apertura como las agencias de viajes tradicionales y de ahí que sea un medio tan empleado». Advierte, de todos modos, de que no son pocos los riesgos que pueden surgir al comprar productos en la red, «de ahí que nosotros siempre recomendamos, sobre todo, acudir sólo a páginas web completamente fiables, huir de ofertas que luego esconden sobrecostes imprevistos y tener la seguridad de que conservamos toda la documentación por si surge un problema o, más allá, si llegara a ser necesario emprender una reclamación», afirma Granell.

El auge de la contratación, sobre todo de viajes y hoteles en internet, tiene un impacto negativo en el modelo de venta tradicional que, aún así, ha logrado resistir incluso a su propia crisis, generada en el 2008 por la quiebra de Lehman Brothers. De hecho, en la última década, el 31% de las agencias de viajes españolas ha echado el cierre, pero las que quedan generan un 5,4% más de empleos, según la Seguridad Social.

Desde la patronal del sector, su presidente, Jesús Ángel Herrera, defiende que «el servicio que recibe el cliente que diseña sus vacaciones a través de nuestros negocios nunca va a poder compararse al de una empresa digital». Herrera avisa: «El modo en que nosotros personalizamos la garantía y el asesoramiento, hacemos el seguimiento continuo del viaje y la seguridad ante un imprevisto, están muy lejos de la capacidad de web para abordar estas situaciones». Añade asimismo que «hay que ser muy vigilantes con los precios». Lo defiende categóricamente: «Es falso que sea más barato contratar por internet; reto a cualquiera a que venga a una agencia a comprobarlo cuando quiera», sentencia.

Sea como fuere, la realidad es la que es y las ofertas de productos turísticos bombardean a los clientes en la red sin descanso. Los reclamos a modo de 'chollos de última hora', 'ofertas flash', 'Encuentra aquí tus vacaciones más baratas'... son incesantes. Resulta verdaderamente difícil no sucumbir ante tanto estímulo. Más aún, en tanto la alternativa a poder conectarse donde sea y cuando se quiera siga implicando necesariamente tener que sacar tiempo y acudir in situ a una agencia de viajes.

Mientras las organizaciones de consumidores aplauden la máxima de que «a más competencia, mejores precios», desde las agencias insisten: «Nada como el asesoramiento de un profesional y la seguridad que nosotros siempre garantizamos». Valga un dato para la reflexión: según un estudio de la escuela de negocio digital ISDI, más de la mitad de los clientes que terminan contratando en internet ha acudido antes a una agencia para informarse.