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Laura –su nombre no es real porque prefiere preservar su identidad– lleva tres años trabajando de camarera en un local de la calle Portales de Logroño. No ha pasado por ninguna escuela de hostelería, su formación se la han dado los años de experiencia trabajando ... con una bandeja en la mano. «No es el empleo de mi vida», admite, «espero poder dedicarme a otra cosa, a lo que realmente me gusta. La hostelería me da un sueldo y un trabajo estable, pero no quiero ser camarera siempre. Esto no es vida». A pesar de ello, Laura dice ser de las 'afortunadas' en su profesión: cobra las horas que trabaja de más y se respetan sus tiempos de descanso. «Pero tengo compañeros a los que no les pagan las horas extras y trabajan hasta 10 horas seguidas sin un minuto para descansar», afirma.
Las malas condiciones que denuncia esta camarera logroñesa repercuten en las posibilidades de encontrar personal. La empresa de empleo temporal Nortempo La Rioja, da fe de ello. Su directora, Gisela Nestares, admite las dificultades que tienen para cubrir las vacantes tanto de camareros como cocineros. Por dos razones: no hay candidatos dispuestos a trabajar en hostelería y, los que sí lo están y tienen experiencia, buscan otras salidas profesionales. «Es fundamental dignificar el sector, a través de la cualificación y las condiciones laborales dignas», apuntan desde la empresa, a la vez que recuerdan que disponen de cursos de formación en hostelería que son gratuitos y están subvencionados por el SEPE.
El sueldo bruto de un camarero en 2021 fue de 16.157,68 euros. El convenio de Hostelería incluye una revisión salarial respecto al IPC, que este año supone una subida del 4,75% con respecto al pasado. Desde UGT La Rioja recuerdan a todos los empleados del sector que pueden solicitar su actualización salarial. «Lo que ha pasado es que, durante la pandemia, cuando se produjeron los ERTE, muchos camareros comprobaron que, en vez de estar contratados a jornada completa, solo estaban dados de alta por la mitad de la jornada», recuerda la secretaria general de la Federación de Servicios de UGT, Ana Cruz-Llach. «Se sintieron engañados. Si a esto le añadimos las largas jornadas laborales, el resultado es que muchos optaron por buscar otros empleos durante el cierre de la hostelería. Y no han vuelto». Esta puede ser una de las razones por las que a los empresarios les cuesta encontrar profesionales para la hostelería. Junto con la imposibilidad de conciliar la vida familiar con el trabajo.
Ana Cruz-Llach | UGT La Rioja
«En ocasiones, no se cumple el convenio, se deben respetar los periodos de descanso, las vacaciones y pagar los días festivos como tales. Por no hablar de las horas extras», apunta la representante sindical. Desde UGT apuestan por profesionalizar al sector. «Presumimos de la excelencia gastronómica de La Rioja y luego tenemos a camareros y camareras que son mano de obra barata trabajando todas las horas del mundo», asegura Cruz-Llach.
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