Citroën Auto Iregua cierra tras acordar con la plantilla las indemnizaciones por despido

Este despido colectivo será «escalonado», añaden las mismas fuentes, de tal forma que la mayor parte de los trabajadores saldrán con el cierre de 2023 y otro grupo de operarios menos numeroso lo hará durante el mes de enero. «No hay que olvidar que a lo largo de este año ha habido media docena de personas que se han ido marchando después de que a finales de diciembre de 2022 hubiera un expediente de modificación sustancial de las condiciones de trabajo» en forma de bajada de las retribuciones salariales, recuerdan desde UGT.

Sin embargo, Citroën Auto Iregua acumula pérdidas en los últimos cuatro años, como han señalado desde la empresa, y esta circunstancia unida a un cambio en la política comercial por parte de Stellantis –fabricante de los vehículos de los dos ángulos circunflejos– que ha reestructurado las condiciones para su red en Europa han desembocado en el cierre del negocio.

«Los trabajadores se van directamente al paro, de momento no saben nada de recolocaciones en otros concesionarios», explican portavoces sindicales, aunque también confían en que «mecánicos, chapistas o pintores no tengan problemas para encontrar trabajo», bien en concesionarios de la misma propiedad que el de Citroën, como pueden ser Renault Auto Urbión o Mercedes Auto Oja, o en otras empresas.

En este sentido, los dueños de Auto Iregua están en contacto con diferentes establecimientos del sector así como con talleres para que puedan hacerse cargo del servicio técnico oficial de los vehículos y atiendan a los clientes que conducen un Citroën. Asimismo, todavía no hay una confirmación de quién puede asumir tanto esta marca francesa como DS, que ha formado parte de Auto Iregua desde el año 2018.

Aunque ahora cesa la actividad comercial y de talleres, «habrá una par de personas de administración y gerencia algún mes más para proceder a un cierre ordenado de la empresa», concluyen portavoces del sindicato UGT.