Cientos de manifestantes recorren el centro de Logroño al grito de 'justicia y respeto'

Entre las imágenes que dejó la protesta, destacó por ejemplo la de Isabel Trinchete, que entregada a la causa con dos corazones morados pintados en la cara e intentando abrirse camino con su silla de ruedas, acudía con un redoblado mensaje. «Las mujeres como yo sufrimos doble frustración, así que hoy tenía que estar aquí», reivindicó a título particular. Otros asistentes hicieron gala de su creatividad con originales 'performances' como la que protagonizó un grupo de diez jóvenes ocultas tras unas máscaras blancas. «Pertenecemos al bloque abolicionista de la prostitución y los vientres de alquiler y, en general de cualquier forma de explotación de la mujer», se explicaba Isabel exhibiendo un embarazo ficticio. El sentido del humor y el sarcasmo estuvieron muy presentes. Otros eslóganes muy repetidos hacían referencia a las relaciones tóxicas: «Si callada estoy más guapa, me voy a poner feísima» o «Sola y borracha quiero llegar a casa». En el recorrido tampoco faltaron grupos de scouts, orgullosos de su ideario, «que siempre ha apostado por la coeducación y sobre todo por la igualdad de capacidades desde edades tempranas». Las reivindicaciones de Amnistía Internacional también se hicieron presentes y visibles con unas cuidadas pancartas. «En España queda mucho, pero en otros países es mucho peor...».

El violeta impregnó el recorrido, convocado por la Plataforma 8M (CC OO, UGT, USO, Mujeres riojanas progresistas y PSOE). Cada vez son más quienes acuden con algún complemento con este color que identifica el Día Internacional de la Mujer. Gorros, bufandas, gafas, abrigos, camisetas... tiñeron la multitudinaria manifestación que recorrió las calles Portales, Murrieta, Gran Vía, Vara de Rey y El Espolón, atestado a esas horas por logroñeses atraídos por Logrostock y donde al final aparecieron una veintena de tractores de los 'chalecos amarillos'.

El recorrido terminó de nuevo en la Glorieta donde se leyó un manifiesto, con el que se recordó que «todos debemos ser iguales ante la ley y en la vida diaria en todos los aspectos, laborales, escolares, familiares y sociales». Para ello, «necesitamos acciones con enfoque feminista, que visibilicen que las mujeres somos diversas, con condiciones y necesidades particulares, así como con problemáticas diferentes». Por tanto, reclamaron recursos y alternativas acordes a las necesidades «para lograr transformar nuestras condiciones particulares». Con anterioridad, la portavoz de la Plataforma, Naiara Hernáez, explicó que hoy «volvemos a las calles» para incidir, sobre todo, «en la palabra respeto ya que creemos que a todas las mujeres aquí presentes, en más de una ocasión, nos han faltado el respeto en nuestra vida, sobre todo por el mero hecho de ser mujer».

«Y lo que más nos aterra es que estas faltas de respeto se están repitiendo como frases de la vida cotidiana», añadió. Como reconoció, es «necesario salir» porque «la unión de todo el bloque feminista, incluyendo a todas las personas que así se sientan feministas, es la base sólida y fuerte para hacer frente a los discursos de la ultraderecha y para frenarlos».