El Centro de Salud Mental se queda sin aire acondicionado en plena ola de calor

Las altas temperaturas provocadas por la ola de calor están agravando una situación ya de por sí difícil. Tal y como denuncia N.C.P, una trabajadora del centro, el sistema de aire acondicionado no funciona correctamente desde que se construyó el edificio, en 2009. «En algunas habitaciones hace demasiado frío y en otras, al no refrigerar correctamente el sistema se llegan a sobrepasar los 30 grados», asegura. Y añade que «en invierno es igual: habitaciones con un calor terrible y otras que están completamente heladas».

La situación es todavía más preocupante si cabe, porque los pacientes de Gerontología, actualmente con 63 residentes en planta, no pueden expresar su malestar ya que muchos de ellos no son capaces de comunicarse por si mismos. Son sus ciudadoras las que advierten su estado al comprobar su sudoración. «Están mucho más inquietos e incómodos de lo habitual», recuerda esta trabajadora. Además, las ventanas de esas habitaciones son abatibles y no se pueden abrir para ventilar. Algunos residentes que se han contagiado de COVID deben permanecer aislados en sus habitaciones, convertidas en verdaderas saunas para ellos y para los trabajadores que deben atenderles con los equipos de protección personal a más de 30 grados.

Sonia Aparicio, delegada de Sanidad de la CSIF en La Rioja, asegura que «este problema lleva años produciéndose. Y no se va a acabar con la instalación de unos toldos, como se pretende». «Los responsables del centro están haciendo lo que tienen que hacer: que es dar parte al Servicio Riojano de Salud porque el verdadero responsable de buscar una solución es la administración», añade la delegada sindical.

El Servicio Riojano de Salud se afirma que se tenía constancia de la situación por la que atraviesan los residentes del Centro de Salud Mental debido a las incidencias del aire acondicionado y que, actualmente, se está trabajando para darles una solución.