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Cuatro años después de que la Audiencia Provincial de Logroño le condenara a tres años y medio de cárcel por estafar cerca de medio millón de euros a cuatro vecinos de Quel, la Unidad de Policía Judicial Adscrita a los juzgados de la plaza de Castilla, tal como informa abc.es ha dado caza en Madrid a Jorge Lozano Belver, un embaucador profesional, un hombre que llegó a amasar una fortuna de 1,3 millones de euros ofreciendo suculentos beneficios a cambio de que invirtiera en los negocios que él decía dominar.
Ya en prisión, este hombre, de 43 años, sobre el que pesa una requisitoria de La Rioja, deberá cumplir la pena impuesta por la Audiencia Provincial de Logroño por una trama que desplegó con toda argucia entre los años 2006 y 2009. Entonces, él se hizo pasar por un trabajador de la entidad financiera ING Direct y la pareja que tenía en aquel momento, por la propietaria de una asesoría ficticia dedicada a la gestión de patrimonios mobiliarios. Todo un despliegue de artimañas para estafar a cuatro vecinos de Quel.
El más perjudicado fue un matrimonio de esta misma localidad riojabajeña. Lozano convenció a la pareja para que invirtiera sus ahorros en operaciones de ING Direct. De hecho firmaron varios contratos con esta entidad a instancias del ahora detenido quien les pidió que transfirieran el dinero a una cuenta que estaba a su nombre. Con ese ardid, hicieron transferencias por 60.000 euros destinados, presuntamente, a un depósito a plazo fijo. Luego, les convencieron para que transfirieran dinero a otra cuenta para invertir en la compra de diferentes valores bursátiles y fondos de inversiones... así hasta completar más de una veintena de transferencias por 441.000 euros. Aquellos hechos no quedaron impunes y en el 2016, la Audiencia condenó a Jorge Lozano a tres años y medio de cárcel y absolvió a su compañera.
Aquella sentencia que recurrió infructuosamente en casación ante el Supremo no fue la única. Acumulaba dos requisitorias de ingreso en prisión y tres órdenes de busca y captura, pero ninguna de ellas impidió que siguiera 'operando' haciéndose pasar por un sinfín de personajes. Desde un empresario de éxito hasta un experto broker e incluso simuló ser un antiguo teniente del Mando de Operaciones Especiales.
Pese a la apariencia camaleónica, su forma de actuar era siempre la misma. Primero se ganaba la confianza de sus víctimas y después de mostraba como un experto en todo tipo de inversiones. No tenía escrúpulos, llegó a engañar a su esposa, con quien tuvo dos hijos, y a una pareja sentimental a quien convenció para que le entregara 18.000 euros para un contrato de arras de una casa en la que supuestamente iban a vivir juntos.
Un chivatazo ha dado al traste con la vida de este particular estafador. Al parecer estaba saliendo con una joven brasileña. Era cuestión de seguirle la pista y así fue. Jorge Lozano estaba cenando en el famoso restaurante Txistu junto a un grupo de potenciales víctimas. Como relata abc, la policía esperó a que terminara y le detuvieron hasta que se dirigió al aparcamiento. El pasado martes el juez decretó su ingreso en prisión y ahora deberán notificar su detención a la Audiencia Provincial de La Rioja para que cumpla la condena que le impusieron en su día.
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